Igueste de San Andrés denuncia el vertido de aguas fecales al mar

Estado actual del emisario en la playa de Igueste de San Andrés. / DA

YAZMINA ROZAS | Santa Cruz de Tenerife

Los vecinos de Igueste de San Andrés, en Santa Cruz de Tenerife, denunciaron ayer una nueva rotura del emisario submarino de la zona con el consiguiente vertido de aguas fecales sin tratar al mar y la contaminación de la playa donde está ubicado, conocida como Los Barquitos.

Desde la Asociación de Vecinos Haineto Príncipe de Anaga afirmaron que en la zona “se puede ver el agua turbia y el tubo totalmente roto vertiendo estas aguas fecales en la costa”. “Desde hace más de 30 años Igueste envía sus aguas fecales al mar sin tratar y en la misma costa, ni siquiera tiene un tubo que las lleve al interior del mar, contaminando la costa”, apuntaron.
Por ello, exigieron a Emmasa y al Ayuntamiento de Santa Cruz que construyan la depuradora que la administración y la empresa llevan prometiendo a los vecinos desde hace años. “El emisario se rompe todos los años, tiene muchos años y nunca se ha cambiado. Lo que hay que hacer aquí es una depuradora, que es lo que nos prometieron y que no llega nunca y que encima nos están cobrando en las facturas del agua. Ni el Ayuntamiento, ni Emmasa, ni la Dirección General de Costas ponen atención ni remedio a este problema con el que llevamos conviviendo tantos años los vecinos de Igueste”, reclamaron.

A juicio de los vecinos de Igueste de San Andrés: “Emmasa es la mayor estafa que han hecho a los vecinos de Santa Cruz, ya que no solo tenemos problemas con el emisario, también con el alcantarillado que recorre el barranco, que tiene fugas”.

Fosas sépticas

En la última referencia sobre este tema, en el marco de una reunión del alcalde, José Manuel Bermúdez, y el concejal de Obras y Servicios Públicos, Dámaso Arteaga, con los vecinos en abril del pasado año, los representantes municipales afirmaron que estudiarían la posibilidad de instalar fosas sépticas para solucionar el problema del emisario submarino en mal estado, en vez de una depuradora, que consideraron la opción menos viable. Bermúdez informó de que se había desechado ese proyecto porque el Ayuntamiento no dispone de los recursos económicos necesarios para construir una depuradora moderna que no emita olores ni ruidos.

Sin embargo, Arteaga apuntó que el plan de las fosas sépticas también tenía sus dificultades, como encontrar el punto exacto donde ubicarlas, lo que dependía del PGO. Asimismo, apuntó que si se instala en dominio público marítimo-terrestre hace falta la autorización de la Dirección General de Costas, a lo que añadió que, además, son terrenos particulares, por lo que pidió la colaboración de los vecinos para que cedan, gratis o a un precio económico, un espacio al Consistorio local. Otra dificultad añadida es hacer llegar la maquinaria necesaria para realizar las obras hasta el punto que se seleccione, lo que conllevaría tener que alargar primero la carretera.