Rescatado un parapentista que se quedó colgado de unos cables de alta tensión

DIARIODEAVISOS.COM | Santa Cruz de Tenerife

Alejandro, un vecino de la Punta del Hidalgo de unos 45 años de edad y experimentado parapentista, pasó ayer varias horas colgado de un cable de alta tensión al que un inesperado cambio del viento dominante lo atrajo sin que nada pudiera hacer por evitarlo. Durante más de tres horas, el infortunado deportista se mantuvo colgado desde una altura aproximada de unos cincuenta metros, concitando la atención de todos aquellos que circulaban por la carretera que circula entre Bajamar y Punta del Hidalgo a la altura de la playa del Arenal.

Al lugar de los hechos acudieron un considerable contingente de servicios de emergencias, entre los cuales se encontraban un helicóptero y un vehículo de tierra del Grupo de Emergencias y Seguridad del Gobierno de Canarias, Bomberos del Consorcio Insular de Tenerife, efectivos del Servicio de Urgencias Canario y agentes de policía, tanto de la Local lagunera como del Cuerpo Nacional de Policía. También hicieron acto de presencia miembros de la Guardia Civil.

En principio, el rescate de Alejandro, que durante la primera hora preocupó considerablemente a las emergencias dado lo inestable de su posición, se intentó desde el aire, pero las condiciones atmosféricas desaconsejaron tal posibilidad.

Aunque con más calma dado que el parapentista logró trepar para afianzar su posición, la escala de los bomberos desplazada al lugar resultó ineficiente a pesar de sus treinta metros de pluma .Así las cosas, se recurrió a la empresa privada, siendo concretamente la compañía Grúas Boni la que cedió una de cincuenta metros que felizmente fue la adecuada para lograr que Alejandro fuera rescatado.

Inmediatamente fue atendido en el lugar por los sanitarios, que en principio le diagnosticaron heridas de carácter menos grave al presentar un cuadro de deshidratación y un traumatismo en uno de sus brazos, al parecer producido cuando se golpeó con el cable.
La víctima fue trasladado hasta un centro sanitario, donde se le realizará una revisión exhaustiva.

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Alejandro pasó horas sujetado con las piernas y los brazos. / DA