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Los pescadores de El Puertito aseguran que los quieren “echar”

   
Francisco Cruz (90 años) y Jorge Fariña (65), dos viejos pescadores, delante de los cuartos de pertrechos. /N.C.

Francisco Cruz (90 años) y Jorge Fariña (65), dos viejos pescadores, delante de los cuartos de pertrechos. /N.C.

NORBERTO CHIJEB | Güímar

Los pescadores de El Puertito de Güímar están en pie de guerra. El ayuntamiento les ha invitado a abandonar los cuartos de pertrechos y el varadero que ocupan en la playa de La Charcada.
Víctor Díaz, patrón mayor de la Cofradía de Candelaria, que aglutina a todos los pescadores desde La Morra hasta la playa de Abades, en Arico -unos 40 cofrades-, señala con amargura que no entiende que “en los tiempos de crisis en los que vivimos se quiera acabar con un sector que da trabajo”, asegurando además que “quieren echarnos de allí sin ninguna explicación lógica”, a no ser -señala- que “quieran favorecer los intereses del restaurante de un amigo del actual grupo de gobierno”, sentenció.
Víctor Díaz reconoció que ahora solo quedan cuatro barcos en el Puertito, pero “que da de comer a diez familias” y que llevan en la zona más de medio siglo, sin que hubiera nunca ningún problema con los vecinos.

El ayuntamiento esgrime que invaden el dominio público marítimo-terrestre y que mantienen el lugar muy sucio, algo que desmiente el presidente de la Cofradía: “todo esto pertenece a Costas, pero los cuartos están hechos por el consistorio desde 1995 (cuando gobernada Tita Díaz) y sin hay cuatro chalanas viejas y abandonadas es responsabilidad del ayuntamiento el retirarlas. Todo eso es una excusa”.

Díaz también denunció que la alcaldesa le enviara hace dos días una carta “amenazante”, al requerir en ella que “tenemos cinco días para presentar la documentación de los barcos y de los cuartos de pertrechos”.

Carmen Luisa Castro les ha invitado a ocupar otro lugar en la zona, como el muelle deportivo, pero el patrón mayor manifiesta que “ese no es nuestro lugar ni allí tampoco nos quieren”, señala enérgicamente.

Francisco Cruz, de 90 años, y Jorge Fariña (65), hijo de Juan El Chinchorrero, fue uno de los primeros pescadores de el Puertito, Según explica, “primero nos situaron en el muelle, que se hizo como refugio pesquero; luego en la playa cercana, y más tarde nos trasladaron hasta La Charcada, donde tuvimos que hacer una caleta para sacar los barcos, no sé qué pretenden ahora”, recalca Jorge Fariña, quien además se queja de que esté “prohibido” pescar en un muelle que, según él, “nunca ha sido de baño y que se hizo simplemente para resguardar los barcos de la mala mar y para cargar las papas hasta la Goleta de Oro”.

“Les proponemos irse a otro lugar”

Carmen Luisa Castro, alcaldesa de Güímar, reconoce que tiene “un problema con los pescadores”, pero admite que ha tratado de llegar a una solución con ellos, “pero no quieren dar su brazo a torcer”. Añade que les han ofrecido irse a otro lugar, pero “se han negado en redondo”. Castro se muestra convencida de que puede haber una solución, pero se muestra firma a la hora de mantener la postura de que los pescadores abandonen los cuartos que ahora ocupan en La Charcada porque, entre otras razones, “están en terrenos de Costas”. Recordó además que ha pedido a los pescadores la documentación, “para saber si están en regla”, admitiendo además que “es un lugar que tienen descuidado y hay mucha suciedad”, señaló Castro.