Respaldo incontestable

Aunque no intervino, Pier animó la junta gracias las más 13.000 acciones que representó. | F.P.

MARTÍN-TRAVIESO | Santa Cruz de Tenerife

Se presentaba como la Junta General Ordinaria de Accionistas del CD Tenerife más importante de la última década. Ciertamente lo fue, si tenemos en cuenta el alto número de acciones, que no de accionistas, que estuvieron representadas en el salón de actos de la Fundación Cultural CajaCanarias, y los trascendentes puntos que fueron aprobados sin oposición alguna. Miguel Concepción y su grupo de trabajo lograron sacar adelante, de la manera más plácida posible, una cita que había quedado pospuesta desde el pasado mes de diciembre.

Al tratarse de la segunda convocatoria, el quórum exigido era del 25%. Se logró alcanzar una cifra histórica. El 48,66% del capital social del club, 85.404 títulos, el mayor porcentaje de los últimos 10 años, fue la cifra de acciones presentadas. 559 accionistas tomaron parte del acto, aunque solo cuatro estuvieron físicamente en la sala.

Miguel Concepción presentó un total de 1.000 acciones propias y de 65.871 en representación de 269 accionistas. David Yanes acreditó 13 títulos propios y 167 en representación de 53 accionistas. Pier Luigi Cherubino acudió con 10 acciones propias y 13.612 delegadas por 212 accionistas. Corviniano Clavijo, miembro del Consejo de Administración, contó con dos acciones propias y 4.582 acciones representadas de cuatro accionistas. Por último, Manuel Ángel Viro estuvo presente con siete acciones propias y 140 delegadas de 16 accionistas.
Había que someter a consulta cuatro puntos, los que figuraban en el orden del día, que eran vitales para la permanencia de la institución en la Liga de Fútbol Profesional (LFP).

En primer lugar había que ratificar el acuerdo con el Cabildo para poder emplear el uso del estadio Heliodoro como un arma para reformular su contabilidad, evitando los fondos propios negativos y equilibrando su patrimonio neto. Por otro lado, estaba sobre la mesa la propuesta de la reducción del capital social con expresa aplicación a reducir pérdidas y que va en la línea de reducir el capital social actual de 10.548.451,50 euros en 8.793.301,50 euros para aplicarlo a pérdidas, mediante la disminución de 50,10 euros del valor nominal de cada acción, quedando reducido el capital a 1.755.150 euros, dividido en 175.515 acciones de 10 euros de valor nominal cada una de ellas.

Todo esto, y el resto de puntos que se sometían a aprobación, concedieron un respaldo abrumador a las propuestas presentadas por el consejo de Miguel Concepción. Los cuatro puntos se aprobaron por unanimidad, gracias al respaldo de 85.404 votos. Ni hubo abstenciones, ni votos en contra.
Pero antes de llegar a ese punto, la directiva utilizó un as que se tenía guardado. Nada más abrir el acto, concedió el uso de la palabra al prestigioso economista Salvador Miranda, quien ha sido el encargado de coordinar el grupo de trabajo que ha logrado adecuar las cuentas del club a la normativa que exige tanto el Consejo Superior de Deportes como la Liga de Fútbol Profesional. Un colectivo compuesto también por el letrado Ángel Fernández Carrillo; Benito Regalado, profesor mercantil; y Corviniano Clavijo, que se incorporó al grupo en diciembre, una vez entró a formar parte del consejo de administración. Salvador Miranda llevó a cabo una explicación clara y efectiva de todos los pasos que se fueron dando hasta lograr que el CD Tenerife no perdiese su plaza en el fútbol profesional el próximo 30 de junio, ya que eso es lo que estaba verdaderamente en juego.

El Tenerife tiene que cumplir con el Real Decreto Ley 1251/1999 de 16 de julio que afecta a las sociedades anónimas deportivas y que señala las condiciones exigibles a los clubes que siendo SAD, hayan descendido a categoría no profesional y vuelvan a ascender. Esas condiciones son: Que el patrimonio neto ajustado sea positivo; que exista el equilibrio del 50% entre el capital social y el patrimonio que exige la normativa mercantil; y que el capital social no sea inferior al 50% del establecido cuando se accedió por primera vez a competición profesional en 1991. Los clubes que incumplan estos puntos, perderán su plaza dentro del selecto club de la LFP.

Hay que tener en cuenta que en las cuentas formuladas el 30 de junio de 2013 el patrimonio neto era de -12.573.067,13 euros y el patrimonio neto ajustado por el Consejo Superior de Deportes era de -14.718.067,13. Había que solventar esa desfase, para lo que se desecharon varias alternativas. Finalmente se optó por lograr incluir en el patrimonio la cesión gratuita del estadio, que el conjunto insular venía disfrutando desde 1.994. Un experto independiente tasó ese uso con un valor de 22.586.000 euros por los próximos 20 años. Gracias a este ajuste, el patrimonio resultaba positivo.

Pero faltaba que el CSD aprobara esta operación, circunstancia que que se produjo el pasado 30 de enero. Así la nueva cifra de patrimonio neto pasaba a ser de 1.059.207,19 euros, cumpliendo así el requisito impuesto por la LFP. Aún faltaban salvar dos escollos más. Luego hubo que reducir el capital hasta los 1.755.150 euros, una disminución con respecto al capital actual de 8.793.301,50 euros. El nuevo capital quedará dividido en 175.515 acciones con un valor nominal que también se reduce de 60,10 a 10 euros. Añadido a esto, al transformarse el club a SAD en 1991, el capital social en ese momento fue de 2.223.522,41 euros, el nuevo capital social es superior al 50 por ciento de esa cantidad, con lo cual también se cumple el punto tercero y por tanto, la permanencia virtual en los despachos. Miranda se detuvo especialmente en explicar las razones por las que se reduce el valor de las acciones. Señaló que el valor nominal del título no es el mismo que el valor patrimonial.

De hecho, antes de la reformulación de las cuentas, el valor contable de cada título era de -71,88 euros. Después de modificar las cuentas del club con el activo del estadio, dicho valor contable pasa a ser de 18,32 euros lo que provoca una revalorización contable de las mismas, pese a la disminución del valor nominal. No obstante lo anterior, el precio de la acciones en el futuro no costarán 10 euros, sino los primigenios 60,10, dado que se le aplicará a cada título una prima de emisión.

Todos esos pasos son los que dio este grupo de trabajo para salvar un match-ball que amenazaba seriamente la estancia del Tenerife en la liga profesional.