El alcalde que más se fija en el PP – Por Román Delgado

Se llama José Manuel Bermúdez (Jose, para los amigos), es alcalde de la capital tinerfeña, por ahora y parece que ya hasta las elecciones de 2015, y el sábado se fue tranquilo a descubrir las joyas naturales y los paisajes rurales del macizo de Anaga, con la certeza de que había robado al PP a una de sus supuestas figuras insulares, alguien que hasta el viernes, cuando se despidió con un desnudo informativo integral, trabajaba como ejecutivo comercial en Radio Club Tenerife. El que será jefe de Gabinete del señor alcalde de Santa Cruz responde al nombre de Alfonso Cabello Mesa y, hasta tres segundos antes de cerrar su contratación en el Ayuntamiento capitalino, pertenecía al PP y a la Ejecutiva insular de este mismo partido. El alcalde José Manuel Bermúdez se fijó en él (¡qué ojo tiene!), que antes había ocupado puesto de elección política en Santa Cruz, en este caso tras meterlo para dentro el pibe de Ofra, Ángel Llanos, en el Organismo Autónomo de Fiestas, el de las contrataciones públicas de aquella manera. El alcalde, que se sepa de CC y parece que candidato a ser candidato a la reelección como regidor local por CC, le ha dado un buen puesto al ex del PP Alfonso Cabello, persona que el viernes de la despedida en su anterior trabajo se mostró alegre, encantado de la vida y orgulloso de la puñalada concedida al PP, hasta hace nada el partido de sus amores. Este señor, el desconocido Alfonso, hombre de la cuerda de Ángel Llanos, admira la ética y la coherencia al mismo nivel que el pibe de Ofra, por ahora en el PP, según el mismo pregona a la vez que apuñala por la espalda a su partido. Jose, Alfonso y Ángel (metido por el alcalde en el comité de sabios de la ciudad -más otras cosas…-, que para el alcalde éste debe ser sabio por lo que cuenta de su exjefa Tavío y Cía) se parecen en algo que a mí me produce náusea: la escasa catadura moral y la deficiente elegancia política demostradas por esta especie de trío de laudes según algunas decisiones que adoptan. Son ejemplos claros de lo que no puede ser ni debe darse en política, pero, por lo que se ve, ellos pasan y han hecho de esto su modus vivendi, y además con premio. Jose, el alcalde, apostó por alguien de su partido o de la cuerda de CC, pero nadie lo quiso a él: ni Jaime ni Cristina ni Santiago…, dicen los medios. Por eso debe ser que tiró del PP, donde, por lo contemplado, hay cosas que interesan mucho a CC y que ponen de los nervios a la base de Coalición en Santa Cruz, que lanza críticas que se escuchan en la plaza Militar. Razón tienen. Esta afición de CC en Santa Cruz por la oposición (herencia de Zerolo) da un poco de grima y resulta tremenda aberración: es incoherente e injustificada. Por decirlo suave, sienta como un gufo apestoso. Muchos empiezan a tener claro a quién ya no quieren como alcalde: cuestión de sumas y restas, Jose. Horror.

@gromandelgadog