Un triste final que afea un gran curso

Otra dolorosa derrota del Tenerife. | SERGIO MÉNDEZ

MARTÍN-TRAVIESO | Santa Cruz de Tenerife

Triste récord el que logró ayer el CD Tenerife. En la historia de este club no hay una racha tan negativa como la que arrastra el este equipo desde el pasado 27 de abril. Ese día perdió ante el Real Jaén y empezó un tortuoso camino que ha desembocado en la consecución de seis derrotas consecutivas por la mínima, 1-0 o 0-1. Además, 551 minutos llevan ya los jugadores blanquiazules sin atinar en la portería rival, otro dato que habla muy mal del triste final que protagonizan unos jugadores desconectados desde que logró la permanencia.

En el duelo de ayer el objetivo que tenían los pupilos de Cervera era llegar con opciones, por muy mínimas que fueran, a la última jornada. Prolongar el sueño de clasificarse para disputar el play-off. 30 segundos tardó el Real Murcia en tirar por tierra cualquier atisbo de esperanza. El medio minuto que empleó Kike García en perforar la portería de Roberto. El goleador pimentonero aprovecha un pase de espuela de su compañero Saúl para encarar el área, escorarse ligeramente hacia la izquierda y, de disparo cruzado, evita la media salida del cancerbero local, quien nada pudo hacer, a pesar de su estirada, por evitar el tanto. Ni sentados estaban los 7.825 valientes aficionados que ayer decidieron acudir al estadio para despedir y agradecer a su equipo la gran temporada que ha protagonizado. Eso sí, afeada enormemente por este terrible y pésimo final.

Tocaba remontar y había tiempo de sobra para lograrlo. Sin Ayoze Pérez en el campo, ni en la convocatoria por culpa de un problema médico, le tocaba asumir la responsabilidad a otro joven: Nano.

El delantero canterano, en boca de gol, dispuso de una buena ocasión para equilibrar el resultado a los 14 minutos de juego. Buen centro de Édgar por la derecha y finalmente el esférico se marchó por encima del larguero de la meta defendida por Casto.

A medida que fueron avanzando los minutos, se hizo evidente que la diana pimentonera la había dado alas, al contrario de lo que pudiese suponer, al conjunto tinerfeño, que buscó el empate de todas las formas posibles pero no pudo con una zaga visitante bien plantada.

Volvió a estar cerca cuando acumuló una doble ocasión. Primero Aridane controló demasiado largo y no pudo certificar una buena oportunidad, que concluyó posteriormente Aitor Sanz con un remate sobre un defensor.

Édgar, con sus internadas por la banda diestra, y Cristo Martín, timoneando al equipo, se convirtieron durante muchos minutos de la primera parte en los jugadores que más problemas crearon a un Murcia únicamente preocupado por aguantar las embestidas rivales.

El final de la primera parte se aproximaba y el gol no llegaba. Todo lo contrario. Estuvo más cerca de caer el 0-2 que el 0-1. Malonga pudo ampliar la diferencia en un balón suelto que remató demasiado cruzado. Final de la primera parte.

Tras el paso por los vestuarios, Cervera relevó a Nano, quien fue perdiendo protagonismo con el paso del tiempo, dando entrada a Aday Benítez.

El guión del partido no varió mucho. El Tenerife seguía controlando el balón porque el rival se lo permitía, mientras que un Murcia sumamente contemplativo contenía sin demasiados agobios el empuje local.

Aday imprimió fuerza durante algunos minutos al ataque local. Suyo fue un remate forzado tras una internada de Édgar. Detuvo Casto sin mayores problemas. Luego lo intentó otra vez Édgar con un lanzamiento lejano que no encontró portería (minuto 48).

La jugada polémica del partido llegó cuando el colegiado David Pérez Pallás no apreció un claro penalti en una mano de Molinero que, desde el suelo tocó con su brazo el cuero dentro del área. Muchas penas máximas le han pitado al Tenerife similares, pero ya se sabe que el criterio arbitral es sumamente diferente. Corría el minuto 49 y otra vez más, al Tenerife lo perjudicaba una decisión del colegiado de la contienda.

Tocaba desplegar todo el arsenal ofensivo y probar fortuna de todas las maneras. También a balón parado. Ricardo disparó por encima de Casto, quien pasó una segunda parte más tranquila de lo que pudiera parecer (minuto 60).
Mientras, el Murcia seguía a lo suyo y al contragolpe, estuvo a punto de aumentar la ventaja cuando en el 70, Kike García con un fuerte disparo estuvo a punto de marcar, pero el balón se le fue ligeramente alto.

Un minuto después, entró Quique Rivero por Ricardo, para luego Juanjo relevar a un Cristo Martín muy participativo durante todo el partido.

En la recta final de la contienda, Juanjo pudo marcar de cabeza, en el mejor acercamiento local de la segunda mitad. Su remate se marchó por encima del travesaño de Casto.

Y eso que en el resto de campos donde también se jugaba el Tenerife mucho, los resultados eran favorables. Sin embargo, de nada valía lo que hicieran los rivales mientras el Tenerife no consiguiese la victoria.

Con el 0-1 se llegó al final del partido y de la temporada en el Heliodoro Rodríguez López. Un empate en la última jornada bastaría para que el Murcia certificara su clasificación a los play-off de ascenso a la Liga BBVA, mientras que el Tenerife viajará a Asturias para jugar en El Molinón sin absolutamente nada que jugarse. Finalmente, seis derrotas consecutivas han afeado el cierre de un curso brillante.