Paulino, el ecologista – Por Juan Henríquez

Con todos mis respetos a las asociaciones defensoras de la naturaleza y el medio ambiente: era hora de que un presidente canario encabezara las manifestaciones ecologistas contra el petróleo. Tras poner todos los mecanismos del Gobierno canario, incluida su finca televisiva de la RTVC, y apoyado por sus íntimos asesores y correveidiles, no dudó el hombre, don Paulino, de ponerse a la cabecera de la manifestación, eso sí, bien lejos de la de Tenerife, para evitar que lo sacaran a gorrazo limpio; el mago se fue a La Graciosa, estaba más feliz que en la romería de San Benito.
Los canarios que estamos a favor de las prospecciones, y posterior negociación para pasar el canon en el supuesto que existiera petróleo, estamos totalmente desprotegidos. Si de antemano los poderes fácticos y medios de comunicación afines al Gobierno canario que preside don Paulino, andan las 24 horas del día machacando el cerebro de los ciudadanos para predisponerlos en contra de las prospecciones, para qué den la consulta de la que hablan. Me imagino que solo votarán los antiprospecciones.

Claro que, mientras aquí una minoría se opone, los marroquíes andan como locos buscando petróleo a escasos 10 kilómetros. Por otra parte llevamos más de 50 años con una refinería en medio del paisaje santacrucero, y todo el mundo mirando para el otro lado. Más de 60.000 buques cruzan nuestras costas cada año, de los cuales casi el 90% transportan mercancías peligrosas, hidrocarburos, ¿y…? Como no tenemos bastantes ejemplos para justificar las prospecciones, ahora el presidente canario, don Paulino, convertido en portavoz de los ecologistas en acción, va y se opone, o rechaza, la llegada de plataformas petrolíferas al puerto de Santa Cruz, que, según el presidente de la Autoridad Portuaria, vienen a reparar.

¿Nos merecemos los canarios y canarias, un presidente que rechaza las perspectivas de mejorar la economía canaria y, por ende, fuente de riqueza y generación de empleo? Rotundamente, ¡NO!

juanguanche@telefonica.net