DOMINGO NEGRÓN MORENO | Santa Cruz de Tenerife
La decisión se adoptó en el primer trimestre de este año y se iba a ejecutar antes del verano, pero el anuncio de la abdicación de Juan Carlos I se precipitó al lunes 2 de junio. Entre las causas del adelanto de la fecha prevista, se especula que la respuesta “responsable y contundente” del Gobierno de Canarias a los sondeos petrolíferos alteró los planes de la jefatura del Estado.
Bromas aparte, el impacto de la renuncia del monarca al trono es atronador y sus efectos son analgésicos. Lo que está detrás está por ver. Por delante viene “una generación que trae esperanza” para reparar las “serias cicatrices” de la demorragia, la democracia que sangra. El ejemplo del rey se lo echan en cara a Paulino Rivero, empeñado en repetir la candidatura de Coalición Canaria a pesar de ese “clamor” del que habla Ana Oramas.
El papel resolutorio de su majestad en la transformación democrática de España ha contribuido al “mayor desarrollo social y económico” de la nación. Tal cortés reconocimiento no quita lo valiente de una sensata reforma de la Constitución que acomode a las personas en un plano plural de igualdad individual y colectiva. La promesa de la unidad diversa coronará la cabeza de Felipe VI, cuya proclamación se ciñe a la legitimidad que le otorga la Carta Magna. Los signos de exclamación van seguidos de interrogantes que cuestionan el modelo que se dio en 1978 y que en 1981 no cedió al golpismo. Se abre aquí un paréntesis para subrayar que la insinuación de un referéndum para votar monarquía o república antes de que las Cortes redacten otro texto con letras de obligaciones y derechos significa escribir garabatos en el libro de las libertades de la soberanía popular.
Los renglones torcidos confunden la lectura y perjudican la comprensión del relato, estructurado en la construcción narrativa de una utopía pragmática: la reipública española.
Días contados
-Lunes. El mismo día en que España se paralizaba con la noticia de la abdicación del rey, el Consejo de Gobierno de Canarias se conjuraba contra las prospecciones petrolíferas en aguas próximas a las islas de Lanzarote y Fuerteventura. Ante “un asunto donde toda la sociedad canaria ha de tener la posibilidad de intervenir”, el Ejecutivo regional restauró el borrador del reglamento de la Ley de Participación Ciudadana que en 2012 depositó en la papelera de reciclaje.
-Martes. El paro lleva unos meses de vacaciones, aunque los hoteles de cinco estrellas cuestan mucho trabajo. Para disfrutar de estancias de alta categoría hace falta emplearse más a fondo.