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Sectores que no dejan de perder peso

   
CONSTRUCCIÓN TRABAJADOR

Imagen de archivo de un trabajador del sector de la construcción. / DA

ROMÁN DELGADO | Santa Cruz de Tenerife

El inicio de la crisis financiera, allá por el año 2008 (luego convertida en recesión prolongada, al menos en España), ha afectado de manera brutal a tres sectores productivos, alguno de ellos antes muy boyante, en la Comunidad Autónoma de Canarias.

El estallido financiero global, el que fue bien visible, casi palpable, a finales de 2008, se ha convertido en un auténtico tsunami para algunos grupos de actividades productivas en las Islas, en especial para la construcción, la industria manufacturera y las labores propias del sector primario, que incluye la agricultura, la ganadería, la pesca y las tareas forestales y de silvicultura. Si se analizan los datos estadísticos que sirve el INE en su Contabilidad Regional de España para 2013 con base 2008, se puede apreciar con nitidez, lo que se ve en el caso canario, el impacto muy destructivo de la crisis económica en las Islas, donde se debe tener muy en cuenta el destrozo que ha dejado el estallido de la llamada burbuja inmobiliaria.

Así, si se toma como periodo de referencia para este análisis el sexenio 2008-2013, con valores a precios constantes (variaciones de volúmenes), se accede a datos espeluznantes, como, por ejemplo, que el sector de la construcción en el Archipiélago se ha quedado auténticamente desplumado en esos seis años, pues de la riqueza absoluta que éste generaba en el año 2008 (cuando arranca la crisis) para la economía canaria (medida en el umbral de los 100 puntos) ha transitado hacia los 60,4, lo que viene a indicar que se ha dejado por el camino casi 40 puntos de riqueza. El efecto de esta debacle sectorial en la variable de empleo total ha sido el siguiente: las Islas pasaron de dar trabajo en esas actividades a 105.300 isleños en el año 2008 a sólo 47.100 en 2013, tal y como recoge el INE en el ya citado trabajo estadístico.

Este mismo sector pasó en aquel año de generar riqueza por valor de 4.757,1 millones de euros, en este caso a precios corrientes, a tan solo 2.599,8 el año pasado. Algo parecido, ya que por suerte no se ha producido con la misma intensidad que en la construcción, ha ocurrido en los sectores primario y de la industria manufacturera, con caídas por encima de los 20 puntos en ambos casos. El grupo de actividades del campo y la pesca se ha hundido en el mismo sexenio, siempre según el cálculo del INE a precios constantes. Éste ha producido en 2013 (77,3 puntos) casi un cuarto menos de valor que lo que logró en 2008 (100). Algo similar pasó en el otro sector indicado, el manufacturero, cuyo motor económico perdió fuerza respecto a 2008 (100) hasta quedarse en los 72,5 puntos. Por la construcción, el sector primario y la industria manufacturera de Canarias la crisis ha pasado como un tsunami.

En los tres casos reseñados, la pérdida de peso económico ha sido progresiva en los seis años, de 2008 a 2013; esto es, sin la existencia de descansillos, sino que lo generado en un año siempre se ha reducido al siguiente, según la medición hecha por el INE a precios constantes.
Para el sector primario de las Islas, se aporta la siguiente caída en empleo total: de 16.500 personas en 2008 a 14.000 en 2013, con 2.500 menos. Algo similar se detecta en la industria manufacturera, que evoluciona de 40.800 en un extremo anual, el más positivo, a 29.900 en el otro, en 2013.

En lo que concierne a valores absolutos de generación de riqueza por año, en euros y esta vez a precios corrientes (sin tener en cuenta el efecto de la inflación), se obtiene la siguiente secuencia para esos dos sectores: el primario, de 466,5 millones de euros a 411,5, y en industria manufacturera, de la cota de 1.937,5 millones a la de 1.599,4.

En el sector servicios
La participación de los distintos sectores en el PIB canario, medida a precios corrientes, confirma la misma hecatombe y desvela cuál es el truco de que la economía de las Islas no haya ido aún mucho peor. El sector servicios, que incluye, entre otras actividades las comerciales y de hostelería, aportó en 2008 el 29,9% del PIB de las Islas, mientras que en 2011 llegó al 32,8%. La industria, esta vez gracias a la inclusión del segmento extractivo y no sólo con el manufacturero, se mantuvo de 2008 a 2013 en la línea del 12%. En cambio, tanto el sector primario como la construcción sufrieron descensos, aunque nada parecidos. En el primer caso, siempre a precios corrientes, la participación en el PIB regional se redujo del 1,1% al 1%, mientras que en el segundo el leñazo fue de órdago: la construcción daba al PIB canario el 11,3% en el año del estallido de la crisis, 2008, y este alimento sufrió un recorte hasta el 6,5% el año pasado. Ha sido una caída fortísima.

La mejor de lo malo en 2013
Canarias y Baleares fueron las comunidades autónomas que registraron en 2013 un menor descenso en sus PIB en términos de volumen (precios constantes), con menos 0,4%. A éstas le siguieron la Comunidad Valenciana y Cataluña, con menos 0,8%, en ambos casos.

Aparte de las cuatro regiones mencionadas, Galicia, Castilla-La Mancha, la ciudad autónoma de Ceuta y Aragón se situaron con retrocesos menores a la media española, que fue del -1,2%.

Las regiones que obtuvieron los peores registros fueron Asturias y Castilla y León (con menos 2,1%), seguidas de Cantabria y el País Vasco (con menos 1,9%). Si se analizan los valores de PIB por habitante, País Vasco fue la que presentó un mejor registro (29.959 euros), el 34,5% superior a la media española (22.279). Canarias tiene 18.873 euros.