Uno a uno, todos – Juan Cruz

Estos días se pregunta la gente qué hacer, cómo tú mismo con respecto a Canarias. Están pasando cosas muy graves en España, y en nuestra tierra también, y la solución, o las soluciones, pues son muchos los problemas, no son ni fáciles ni simplemente colectivas. Estos problemas los tenemos que resolver uno a uno. Tú me has contado un chiste muy atinado, yo te cuento una conversación con mi quiosquero. Félix, que así se llama, me suele preguntar cómo va la vida, pues durante la jornada él no lee los diarios y considera que yo me sé la lección antes de que amanezca. No le falta razón, pues no sólo me levanto muy temprano sino que desde muy temprano escucho las noticias, como si las novedades me ligaran con la vida. Lo cierto es que el otro día fue él quien me contó las novedades. Ya sabes el resumen: esto es un desastre y vamos al desastre, todo el mundo lo hace muy mal, del Gobierno abajo. Ah, le dije, eso no es una novedad. Siempre ha sido así, lo que pasa es que durante muchos años eso no se podía decir ni en voz baja, o sea que algo hemos ganado: la cosa está mal, pero podemos decir que los responsables son los del Gobierno. Ahora bien, le dije: ¿y tú qué haces para mejorar la situación? Ah, muchas cosas: trabajo todo el día. ¿Y tus amigos?, le pregunté otra vez: Hay de todo, pero todos hacen lo que pueden. Le dije que eso estaba muy bien, así que todo no estaba tan mal. De lo que se trata, convine con él, es de seguir trabajando, uno a uno, independientemente de que el Gobierno fuera esto o lo otro, de que los gobernantes, a cualquier nivel, nos parecieran unos ineptos. Pues parece que la corrupción, la mala gestión, la vaguería, son cuestiones de la superestructura y no de nosotros mismos también. Félix me miró con cierta desconfianza, pues llegó a pensar que yo le acusaba de ser parte del problema y no parte de la solución. Pues sí, querido Juan Manuel, pienso que uno a uno podemos salir de esta, no es tan solo cuestión de la política. Nos vemos el sábado, para que discutas con el amigo Évole.