Domingo Ramos, concejal de Infraestructuras, firmó ayer la recepción de la obra iniciada en 2011. / DA
Han tenido que pasar más de cinco años desde que se iniciara el proyecto para que Candelaria pueda presumir, previsiblemente a partir de septiembre, de un centro tecnológico. El Ayuntamiento de la Villa Marina recepcionó ayer la obra del CTCAN (Centro Tecnológico de Candelaria) ubicado en las parcelas 9 y 10, manzana XI, del Polígono Industrial de Güímar, “una instalación que pretende generar nuevos nichos de empleo, relacionados con el I+ D+I”, apunta el alcalde de Candelaria, José Gumersindo García Trujillo.
El alcalde recuerda que el centro se diseñó atendiendo a dos finalidades, por un lado servir de base de operaciones a jóvenes emprendedores y empresas ya en funcionamiento que desean contar con un espacio físico para desarrollar su labor, y por otro se podrá usar para realizar jornadas, talleres y encuentros que promuevan el intercambio de experiencias y contribuyan a la elaboración de nuevas propuestas relativas a la creación y distribución de contenidos digitales de calidad a través de las redes telemáticas.
Domingo Ramos, concejal de Infraestructuras, apunta que la obra que ha tenido un coste de más de dos millones y medio de euros, si tenemos en cuenta la inversión por la compra parcela y la ejecución de la infraestructura. “Desde el inicio de las obras en 2011 ha habido una serie de contratiempos que han retrasado su finalización, pero estamos satisfechos de que este terminada y pueda convertirse en un referente, no solo del Valle de Güímar sino de la Isla de Tenerife”.
Ramos señala que el CTCAN está construido en una parcela de 800 metros, distribuidos en 4 plantas plantas. En concreto, la planta baja se dedicará a la gestión administrativa y contará también con un salón multimedia; el primer y segundo piso estarán dedicados a ubicar el semillero de empresas, para uso de emprendedores y empresas establecidas, con la posibilidad, atendiendo a las necesidades y peticiones, de servir ambas plantas como espacio de formación, ya que se ha buscado la máxima flexibilidad. Por último, en el piso bajo rasante están ubicados los cuadros técnicos, el almacén y los vestuarios.
María Concepción Brito, concejala de Desarrollo Local, apunta que el CTCAN se concibe como centro de emprendeduría y de apoyo a los empresarios, aspectos en los que la Agencia de Desarrollo Local lleva trabajando en los últimos meses, contando ya con un borrador del plan de acción y de reglamento del centro. En este sentido, para dar a conocer las instalaciones se realizará próximamente una Feria de Empleo.
Asímismo, Brito ya ha invitado al profesorado y alumnado destacados en Tecnología de los institutos del municipio a compartir el espacio.
Ahora solo hace falta que la inversión, y el coste de devolver antes de tiempo el préstamo, sirvan para que el edificio situado en la zona de playa La Viuda -inicialmente estaba proyectado en la Rambla de los Menceyes- sea realmente un nicho de negocios.
El préstamo que requiere el Estado
El Ayuntamiento consiguió en 2007 a través del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio un crédito de 2,2 millones de euros, a interés cero y a devolver en 13 años para realizar el CTCAN. La construcción no comenzó hasta febrero de 2011 y desde entonces se han ido incumpliendo los plazos de ejecución, por lo que el Estado, vía judicial, requiere la devolución del préstamo, aunque Domingo Ramos afirma que “ya hemos pagado 1.700.000 euros”.