Hotel Bahía del Duque. | DA
ANTONIO J. OLIVERA / DAVID PADRÓN MARRERO / ROMÁN DELGADO GARCÍA* | Santa Cruz de Tenerife
Pendientes de que el Instituto Canario de Estadística (Istac) publique el dato correspondiente al segundo trimestre del año 2014 sobre Producto Interior Bruto (el PIB) regional, la información de naturaleza coyuntural disponible apunta a una más que probable prolongación de la tenue recuperación de la actividad económica iniciada en el último trimestre de 2013. De cumplirse ese pronóstico, el PIB canario encadenaría tres trimestres consecutivos con tasas de variación reales interanuales y positivas, superando, muy probablemente las del conjunto nacional en todos ellos.
Tirón del sector servicios
Esa tímida reactivación ha venido de la mano, una vez más, del sector servicios, desempeñando un papel protagonista el componente exterior. Según se desprende de los datos de la Contabilidad Trimestral de Canarias, elaborada por el Istac, tras cinco trimestres consecutivos registrando tasas reales de variación interanuales negativas, el volumen de producción del sector servicios canario torna a la senda del crecimiento en el tercer trimestre de 2013.
En el último trimestre del año pasado y el primero del corriente, la tasa de variación interanual del volumen de producción del sector ha seguido moviéndose en terreno positivo, aunque se aprecia una notable desaceleración en el mismo arranque de 2014.
La información disponible en el momento de redactar el presente informe de coyuntura permite adelantar que el volumen de producción del sector servicios canario correspondiente al segundo trimestre del año debe haber vuelto a crecer en términos interanuales, encadenando así cuatro trimestres seguidos de avance.
Dinamismo en turismo
Según los datos facilitados por el Instituto de Estudios Turísticos (IET), los meses de abril y mayo de 2014 han dado línea de continuidad a los buenos resultados registrados en el arranque del año en términos de número de turistas extranjeros llegados a Canarias. Se trata de una tendencia alcista que arrancó en el segundo trimestre de 2013, por lo que las Islas encadenan ya 13 meses consecutivos con tasas de variación interanuales positivas.
En el informe de coyuntura correspondiente al primer trimestre del año, se llamaba la atención sobre el buen dato del mes de marzo, en el que se recibió, siempre según el IET, 1.119.506 turistas extranjeros. A pesar de que en el año en curso la Semana Santa cayó bastante avanzado el mes de abril, mientras que en 2013 fue en el mes marzo, el hecho de que en marzo de 2014 el número de turistas extranjeros haya sido el 7,66% superior al de hace un año dice mucho del buen momento que vive el sector.
Esta tendencia parece haberse mantenido en abril de 2014, mes con 956.544 turistas extranjeros, el 22,12% superior al de hace un año. Evidentemente, detrás de este incremento porcentual tal abultado se encuentra, tal y como se ha adelantado, el efecto Semana Santa. Pero si se analiza en términos absolutos, se comprueba que en ningún otro mes de abril desde el año 2000 se registra un número de entradas de turistas extranjeros mayor.
La tendencia ascendente seguida por los turistas extranjeros entrados en Canarias se mantuvo en el mes de mayo. Un total de 776.717 turistas de otros países visitaron las Islas, según el IET, el 12,49% más que el mismo mes del año anterior. Aunque en el momento de servir el presente informe aún no se han publicado los datos correspondientes al mes de junio, todo hace indicar que el balance global de segundo trimestre será positivo.
El buen comportamiento de las llegadas de turistas extranjeros ha tenido su reflejo en el número de viajeros residentes en el extranjero alojados en establecimientos hoteleros. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), durante los cinco primeros meses del año 2014 un total de 1.617.523 viajeros residentes en el extranjero se alojaron en establecimientos hoteleros canarios, el 15,70% más que en los cinco primeros meses del año 2013. Se trata del mejor registro desde 1999, primer año en que el INE publica los datos de su Encuesta de Ocupación Hotelera (EOH). Los meses de abril y mayo de 2014 registraron incrementos interanuales en el número de viajeros residentes en el extranjero alojados en establecimiento hoteleros del 20,85% y 10,81%, respectivamente. De esta manera, Canarias encadena ya 15 meses consecutivos con tasas de variación interanuales positivas.
Gasto del visitante
El gasto realizado por los turistas extranjeros en Canarias continuó su senda alcista en los meses de abril y mayo, con tasas de variación interanuales del 27,12% y 4,69%, respectivamente. Respecto al turismo nacional, su comportamiento no ha sido tan positivo.
En los tres primeros meses del año siguió contrayéndose, en términos interanuales, el número de viajeros residentes en España alojados en los establecimientos hoteleros de las Islas.
En abril se rompe esta tendencia, con un crecimiento interanual del 25,60%. Aunque, sin duda, el efecto Semana Santa tiene mucho que ver en la fortaleza de este incremento, merece la pena destacar que el mes de mayo también se ha cerrado con un aumento interanual del 4,85%. Habrá que esperar a los datos de los próximos meses para comprobar si se trata, por fin, de un cambio de tendencia en el comportamiento seguido por el turismo nacional.
Sube el comercio minorista
La reactivación de la actividad en el subsector comercial iniciada en la segunda mitad del año 2013 se ha mantenido durante los cinco primeros meses del año en curso. Según el INE, el Índice de Comercio al por Menor acumula ya 11 meses de tasas de variación interanuales positivas, tanto a precios corrientes (resultado tanto de variaciones en precios como de volumen de actividad) como a precios constantes (resultado exclusivamente de variaciones en el volumen de actividad). En abril y mayo, últimos dos meses para los que se dispone de información, las tasas nominales de crecimiento interanual han sido, respectivamente, del 2,96% y 4,47%.
Sin duda, la dinámica reciente del Índice de Comercio al por Menor puede interpretarse como evidencia a favor de que la demanda interna empieza a recuperarse. No obstante, conviene no despreciar el impacto que sobre el ascenso de este indicador puede estar ejerciendo el tirón de la actividad turística, Adicionalmente, no se debe pasar por alto que, debido al intenso desplome de la actividad comercial durante toda la crisis, el volumen de negocio del sector en el mes de mayo de 2014 apenas llega al 75% del volumen promedio del año 2007.
Según se desprende de la serie del Índice de Ocupación del Comercio Minorista, elaborado también por el INE, el empleo en el ramo comercial ha seguido un patrón de comportamiento muy similar al de su cifra de negocio. No obstante, la recuperación se inicia, como era previsible, un mes más tarde. Además, el ritmo de avance de la ocupación es claramente inferior al del volumen de actividad, lo que evidencia, entre otros aspectos, que la productividad aparente del factor trabajo, uno de los talones de Aquiles del sector, ha mantenido una tendencia ascendente en el transcurso de los últimos meses.
‘Vía crucis’ de la construcción
Mientras que el sector servicios fue el que mejor capeó la crisis y el que más está contribuyendo a la recuperación del conjunto de la economía canaria, el sector secundario y, en concreto, la industria manufacturera y la construcción, siguen en su particular vía crucis.
El pinchazo de la burbuja inmobiliaria y la congelación del segmento de la ingeniería civil tras la puesta en marcha de los programas de consolidación fiscal han sumido al sector construcción en un prolongado y profundo proceso de redimensionamiento. Así, por ejemplo, desde que arrancó la crisis, el Valor Añadido Bruto (el VAB) del sector de la construcción se ha cerrado, según el Istac, todos los trimestres con tasas reales de variación interanuales negativas. Y aunque el desplome de la actividad es cada vez menor, el volumen de producción en el primer trimestre de 2014 (último dato disponible en el momento de elaborar el presente informe) es aproximadamente el 45% inferior al del mismo trimestre de 2008 (año en el que arranca la serie elaborada por el Istac).
La atonía de la actividad en el ramo de la construcción se ve confirmada por la información facilitada por el Ministerio de Fomento. El valor de los presupuestos de ejecución material de los visados de obra nueva sigue bajo mínimos.
En el promedio de los primeros cuatro meses de 2014, el valor acumulado ascendió a 51.985 millones de euros, que no llega a representar ni el 10% del valor acumulado de los presupuestos en el mismo periodo de 2007. Con todo, el último dato disponible, correspondiente al mes de abril de 2014, arroja un avance considerable respecto al mes anterior, y un crecimiento en términos interanuales del 32,81%. Habrá que esperar a los datos de los próximos meses para saber si se trata de un punto de inflexión en el segmento de obra nueva. Con todo, y habida cuenta del elevado stock de bienes inmuebles sin vender, la atonía en este segmento promete prolongarse bastante tiempo.
La situación parece ser algo mejor en el segmento de la ampliación y/o reforma. Aunque el valor acumulado en los primeros cuatro meses de 2014 por los presupuestos de ejecución material de los visados por este concepto apenas llegan al 40% del valor correspondiente al mismo periodo de 2007, los últimos meses del año 2013 fueron testigos de un cambio de tendencia, situación que se ha logrado mantener en el transcurso del primer cuatrimestre del año 2014.
Similar imagen se desprende del análisis de los datos facilitados por el Ministerio de Fomento en relación con la licitación oficial. El valor de lo licitado por las distintas administraciones públicas en Canarias en los cuatro primeros meses del año 2014 ascendió a 54.041 millones de euros, lo que representa el 10,75% del valor de lo licitado en el primer cuatrimestre de 2007. Con todo, conviene advertir que el repunte en la licitación iniciado en los meses finales de 2013 parece haberse mantenido, con altibajos, en el arranque de 2014.
Precios a la baja
El intenso y prolongado desplome de la demanda, especialmente de su componente interno, unido a una aún muy incipiente recuperación económica, de la mano principalmente del componente exterior, tiene su reflejo, como no puede ser de otra manera, en la evolución del Índice de Precios de Consumo (IPC).
De los nueve meses que van desde septiembre de 2013 hasta mayo de 2014, únicamente en el mes de abril la tasa de variación interanual del IPC ha sido positiva (0,01%). Sin duda, la celebración de la Semana Santa en ese mes está detrás de la leve interrupción de la senda descendente mostrada en los meses previos por el IPC general canario.
No obstante, en el mes de mayo (último dato disponible en el momento de redactar este informe), el IPC general ha vuelto a registrar una tasa de variación interanual negativa (-0,26%), con lo que se resucita el fantasma de la deflación.
Casa en construcción. | DA
El temor se acrecienta al analizar la dinámica seguida recientemente por la inflación subyacente, que se supone aproxima mejor el componente estructural, más permanente, de la inflación en una economía. Ésta se calcula a partir del IPC general, al que se le extraen los productos con comportamiento más volátil en sus precios (alimentos sin elaborar y productos energéticos).
Según los datos del INE, la tasa de variación del IPC subyacente en el mes de mayo fue del -0,51% en términos interanuales. De los nueve últimos meses, cinco han cerrado con tasas negativas, y fue el mes de mayo el de la caída más intensa.
Pese a la evidencia acumulada en muchos países y regiones de la Unión Europea durante los últimos años, y en contra de los llamamientos realizados por numerosos economistas y organizaciones advirtiendo de sus nefastas consecuencias, la preferencia por las recetas de austeridad, la lentitud, cuando no incapacidad, de los órganos europeos para tomar decisiones de calado, y la apuesta por dejar en manos del Banco Central Europeo (BCE) toda la responsabilidad a la hora de reactivar la economía en un contexto en el que la efectividad de la política monetaria es, como ha quedado demostrado, muy limitada, han congelado la demanda en niveles mínimos.
Por este motivo, si el paquete de medidas anunciado a comienzos del mes de junio por el BCE (reducción del tipo de interés oficial a su mínimo histórico, inyección de 400.000 millones de euros a la banca a cambio de que preste ese dinero a empresas y consumidores…) no viene acompañado de otras acciones, económicas y fiscales, de carácter expansivo, se seguirá teniendo un grave problema de escasez de demanda, o, si se prefiere, de exceso de oferta, por lo que las presiones inflacionistas serán inexistentes durante mucho tiempo.
Debacle del consumo familiar
Para ilustrar hasta qué punto la demanda interna se ha desplomado, se aprovecha la reciente publicación por parte del INE de su operación estadística Encuesta de Presupuestos Familiares (EPF), que ofrece información sobre la naturaleza y destino de los gastos de consumo final de los hogares (esto es, en bienes y servicios que se utilizan para satisfacer directamente las necesidades o carencias de los miembros del hogar).
Según el INE, entre los años 2007 y 2013, el gasto en consumo final de los hogares canarios se redujo en 2.933,3 millones de euros, esto es, el 14,17%. Este descenso a escala nacional fue del 6,28%, menos de la mitad del registrado en las Islas. De hecho, en ninguna otra comunidad el desplome del gasto en consumo de los hogares ha sido más intenso. Sin duda, el fuerte ascenso del desempleo y a la creciente precarización de las condiciones laborales, más la devaluación salarial, están en la raíz del desplome del gasto de los hogares.
Tras el espejismo, durante el año 2010, de los brotes verdes, el volumen producción (VAB) industrial vuelve a acumular, trimestre tras trimestre, tasas reales de variación interanuales negativas. Esta tendencia se ha mantenido hasta el primer trimestre de 2014, último dato publicado hasta el momento por el Istac. Con todo, e igual que sucede en la construcción, la contracción se ha ido haciendo cada vez menos intensa.
A falta del dato del VAB correspondiente al segundo trimestre de 2014, la información coyuntural disponible para el sector industrial no arroja una imagen muy alentadora.
Así, por ejemplo, las series de Entradas de Pedidos y Cifras de Negocios, elaboradas por el INE, siguen mostrando tasas de variación interanuales negativas. Más aún, entre enero y abril de 2014 ambas magnitudes han registrado descensos interanuales cercanos al 30% cada mes.
La tendencia descendente seguida por el Índice de Producción Industrial (IPI) a lo largo de la crisis ha continuado en el mismo arranque del año 2014.
Mes de marzo
De los cuatro meses para los que se dispone de información, únicamente en el mes de marzo se registra una tasa de variación interanual positiva.
En el resto de meses se siguen acumulando descensos, lo que ha situado el valor del IPI canario en el mes de abril de 2014 el 25% por debajo del registrado en el promedio de 2007.
Aunque el desplome ha sido generalizado, los destinos económicos menos afectados por la crisis han sido la energía (donde el IPI específico se sitúa en abril de 2014 en torno al 4% inferior al de 2007) y bienes de consumo no duradero (en torno al 10% inferior).
Los ajustes han sido mucho más severos en los bienes de consumo duradero (cuyo IPI específico es el 73% inferior al de 2007), bienes intermedios (el 67% menor) y bienes de equipo (con el 51% más bajo).
*ANTONIO J. OLIVERA HERRERA ES DOCTOR EN ECONOMÍA POR LA UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID; DAVID PADRÓN MARRERO, PROFESOR CONTRATADO Y DOCTOR EN ECONOMÍA POR LA UNIVERSIDAD DE LA LAGUNA, Y ROMÁN DELGADO GARCÍA, PERIODISTA Y GEÓGRAFO