Rechazo vecinal a la iniciativa de los surfistas para el dique de San Andrés

El oleaje, sobre todo en las últimas semanas de agosto, suele golpear con fuerza al frente de San Andrés, algo que pretende evitar el dique. / DA

NATALIA TORRES | Santa Cruz de Tenerife

Cuando se tiene tan cerca un deseo tan anhelado, 40 años esperando por un dique semisumergido para San Andrés, acciones como la de la Federación Canaria de Surf, que podría paralizar su construcción al considerar que la obra no se ajusta a lo que necesita el pueblo y tampoco lo hace el proceso administrativo elegido, ayer comerciantes y vecinos mostraban su sorpresa y coincidían en señalar que nunca se les ha presentado esta propuesta así que lo que debe primera es la seguridad frente al cualquier otro tipo de consideración.

“La seguridad es lo primero”, señalaban ayer desde la Asociación de Empresarios de Anaga, su presidente, Christoph Mersmann: “Los empresarios estamos a favor de la protección del pueblo, siempre hemos luchado por el dique aunque no supiéramos si se iba a hacer como un arrecife artificial, con barcos hundidos como alguna vez se propuso o como parece que es la solución final que se ha aprobado en Madrid”. “Lo importante y lo primero es la protección”, añadió.

Para Mersmann la protección que ofrece el dique al frente de San Andrés lleva aparejada “grandes posibilidades” en lo referente al aspecto económico porque “si hay seguridad, mejorarán las infraestructuras y eso permitirá que las cosas vayan mejor para los negocios en primera línea de la costa”. El presidente de los comerciantes de Anaga agradece el interés del colectivo de surfistas por mejorar el proyecto y entiende que lo ideal sería que todas las partes se pudieran reunir con sus respectivo proyectos, pero, insistió “la seguridad es lo primero y después de 40 años esperando, por fin hemos conseguido una solución que confiamos comience a hacerse realidad ya en septiembre con el inicio de las obras”.

Desde la Asociación de Vecinos El Pescador, su secretario, Gabriel Rodríguez, coincide plenamente con los comerciantes, señalando de nuevo que “la seguridad es lo primero”. El representante vecinal valora la buena fe de la propuesta de la Federación pero la considera “extemporánea”. Recuerda Rodríguez que desde 2011, cuando se produjo la última inundación que provocó graves daños, “se está luchando por conseguir el dique semisumergido”. “Hemos mantenido infinidad de reuniones con la Autoridad Portuaria, con el Ayuntamiento, y no hemos visto a la Federación en esos encuentros y tampoco nos han presentado su proyecto”.

Desde la asociación se entiende que la mayoría de los vecinos opinan como ellos, al entender que, aunque la propuesta pueda ser incluso mejor que el dique, ahora lo que prima es que, “por fin se podrá hacer una obra que dé seguridad”.

Explica Rodríguez que el dique es lo que los vecinos han pedido, “durante años hemos visto como el dique de Las Teresitas cumplía con su función y nadie ha dicho nada”, para añadir que “éste es similar y para nada esconde al pueblo detrás de un muro”. Se pregunta el secretario de El Pescador, si el presidente de la Federación Canaria de Surf viviera en primera línea de San Andrés pensaría lo mismo, “los comerciantes y vecinos han sufrido daños y molestias y no queremos estar expuestos a eso”.

“Aunque sólo sea un fenómeno que pase cada tres años, el simple hecho de que haya riesgo para una sola vida humana es suficiente justificación para llevar a cabo esta obra”, añadió.

Otros vecinos coincidían ayer en señalar que nunca han visto a la Federación en algunas de su reuniones y que no es de recibo que ahora se descuelguen con este intento de paralizar el dique.