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José Miguel Pérez: “El mayor riesgo de las primarias abiertas es que alguien crea que se puede traer a gente comprada”

   
Foto ANDRÉS GUTIÉRREZ

Foto ANDRÉS GUTIÉRREZ

SARAY ENCINOSO / DOMINGO NEGRÍN | Santa Cruz de Tenerife

Se abre una puerta al futuro y asoma José Miguel Pérez. Mira de frente. Le quedan menos de diez meses como vicepresidente y los piensa aprovechar al máximo. A su paso deja rastros de tensión interna en el PSOE, que se adentra en el inexplorado terreno de las primarias a la presidencia del Gobierno de Canarias extensivas a los simpatizantes. El secretario general elige el lado positivo: prefiere imaginar que ha perdido las llaves a lamentar que le hayan cambiado la cerradura. Por afinidad, acompaña a Paulino Rivero a la salida. Están de mudanza, pero no tiran la casa por la ventana. Durante el tiempo que queda para las elecciones también seguirá al frente de la Consejería de Educación. Promete ser una época complicada: el curso empieza con una reforma legislativa sin consenso y con una crisis que, cinco años después, no amaina.

-¿Qué escenario político se imagina para después de las próximas elecciones?

“Es complicado, porque creo que nadie hoy puede imaginarse cuál va a ser el resultado de esas elecciones. Ya bastantes sorpresas nos hemos llevado. La verdad es que vamos a estar ante una etapa de intensidad en cuanto a la incertidumbre. A nosotros, al Partido Socialista, nos toca procurar que la certidumbre en la confianza de lo que proponemos se consiga. Ese va a ser el objetivo esencial”.

-¿Cómo se logra eso?

“Hacen falta algunas cosas a fondo. Primero, confiar en nosotros mismos. Segunda cuestión, demostrar que lo que decimos lo hacemos allí donde estamos. Con las limitaciones o con los errores que tengamos, pero que no tergiversemos lo que proponemos. Y tercero, pienso que el Partido Socialista está dando pasos arriesgados que generan tensión, evidentemente, como está habiendo ahora. No los han dado otros partidos del espectro político español, ni siquiera estos que aparecen ahora como novedosos. Tiene que salir bien e impecable. Para eso es fundamental disponer de normas claras, democráticas, y respetarlas a tope”.

-¿Qué se juega exactamente el PSOE en estos procedimientos?

“El partido arriesga mucho, pero también gana mucho con ello”.

-¿El calendario de las primarias que se ha aprobado finalmente es el que deseaba la organización en Canarias?

“Pues, ni nos lo planteamos. Antes había un calendario que nos permitía hacer primarias entre septiembre y enero allí donde gobernábamos. Cuando la nueva dirección
establece otro, lógicamente hubo que acelerar y anuncié mi decisión para que el resto de compañeros y compañeras pudieran salir adelante en sus opciones”.

-Usted ha dejado claro que no avalará a nadie. Sin embargo, se le ha vinculado con Carolina Darias…

“Sí, y algunos con muchísima mala intención. Están por ahí dedicados a desprestigiar candidatos. Suelen estar dando la sensación de que los aparatos van a decidir. Que se olviden. ¿Alguien puede decir que Pedro Sánchez fue elegido por el aparato?”.

-Hay quien lo dice…

“No lo va a poder demostrar en la vida, porque cada militante fue a la urna y en libertad votó en secreto lo que le dio la gana. Aquí va a ocurrir lo mismo. Yo tengo mis preferencias, pero me he comprometido a ser muy discreto. Lo que me preocupa en este instante es que el proceso salga bien. Si no, este partido lo tendrá muy complicado”.

-¿Ha habido mucha tensión en estos últimos meses en el partido?

“Bueno, este es un partido en el que la tensión es una especia de seña de identidad permanente. No lo conozco sin tensión. Es bueno que esté tenso, siempre y cuando sea con respeto democrático”.

-Tensionar para espabilar…

“Nos enfrentamos a experiencias que nadie ha escrito en España. Estamos abriendo un camino y, como todo cambio, se generan situaciones delicadas. A mí me gustan estas etapas. Personalmente, me siento como pez en el agua”.

-¿Cuál es el mayor riesgo del atrevimiento de extender las primarias a los simpatizantes?

“Que no se acaten los procedimientos establecidos, acordados”.

-¿En qué sentido?

“En que se convierta en una carrera de votos, que se pervierta el sistema, en que alguien crea que se puede traer a gente que viene de antemano comprada. Por supuesto, hay otros elementos externos que tratan de tomar las decisiones con intereses espurios. Es un gran reto y simultáneamente un gran riesgo. Los recelos son enormes. Que conste que yo soy uno de los grandes defensores de esa fórmula”.

-El papel lo aguanta todo. Uno puede firmar lo que sea y luego no cumplir…

“Nunca lo he entendido. Sobre todo, cuando lo ha practicado gente con responsabilidades y cargos orgánicos o públicos. Esto de firmar antes de ser candidato, comprometer tu palabra y hacer lo contrario es una incoherencia que te está dando la oportunidad de irte a tu casa”.

-¿La no renovación de las candidaturas en los partidos del Gobierno regional ha sido por un efecto de contagio?

“No, en absoluto. Son dinámicas distintas. La mía fue una decisión personal adoptada desde hace tiempo. Reflexioné mucho, pensando en el Partido Socialista. Lo de Coalición Canaria todos sabemos cómo se ha producido. En cualquier caso, genera una situación política sin precedentes en Canarias. No hay que tenerle miedo a esto. Hay un Gobierno que fue elegido para una legislatura de cuatro años y la siguiente tendría que pasar igualmente por las urnas”.

-No me negará que tanto el uno como el otro han sido cuestionados desde dentro…

“Hablo por mí. Yo sometí este pacto al veredicto de un congreso y de dos comités regionales. Y la mayoría del partido, un 86%, aprobó el acuerdo. Quienes lo cuestionaron, el 14%, han estado en muchas ocasiones haciendo lo que les ha dado la real gana, pegando patadas a la mayoría. Eso no se puede consentir en democracia. No le deseo a ningún dirigente democrático lo que hemos pasado nosotros así. Me resulta inconcebible como forma de actuación”.

-¿Qué les preocupa más, la actitud de la oposición o el relajamiento en sus propios grupos
parlamentarios?

“Quien nos conoce sabe del nivel de responsabilidad y de compromiso. Este hombre [Paulino Rivero] trabaja muchas horas al día, le echa horas, horas y horas… Yo tampoco desfallezco. Estuve en otra Administración pública [el Cabildo de Gran Canaria] y no iba a presentarme en las siguientes elecciones. Hasta el último minuto tuvimos un altísimo grado de intensidad en el trabajo. En cuanto a la tarea de la oposición, respetaremos lo que considere conveniente. Pero el PP va a tener que explicar mucho. Va a acudir a las elecciones con una maletita bastante vacía, por cierto. Por lo demás, estas circunstancias me parecen positivas. Nos acostumbran a sentir el valor del voto, de la democracia”.

-La continuidad de Paulino Rivero y José Miguel Pérez era una garantía para la reedición del pacto. Ya no es tan seguro…

“Yo nunca tuve el horizonte definido acerca de lo que fuera a ocurrir al terminar la legislatura”.

-Es improbable que unas solas siglas formen una mayoría suficiente…

“Con este sistema electoral es imposible. Yo invito al Partido Popular a que acepte el cambio, que pasa por modificar el Estatuto de Autonomía. Nuestra propuesta [de CC y PSOE] combina dos elementos: la singularidad de cada isla y el proyecto común [lista regional complementaria]”.

-El PP también impulsa una reforma. Sugiere reducir el número de diputados de 60 a 50…

“La reducción del número de representantes es una ficción, una ilusión”.

-Considerando que lo del Estatuto no saldrá adelante sin el beneplácito del PP, ¿no se podría intentar acercar las posturas?

“El contenido del cambio del Estatuto incluye todo aquello que el PP planteó en la anterior legislatura. Mayor facilidad para el acuerdo, imposible”.

-Una de las novedades era la capacidad de disolver anticipadamente el Parlamento. ¿Sería de aplicación en este momento?

“En el supuesto de que el Gobierno perdiera el apoyo parlamentario y no hubiera una moción de censura, lo natural sería que se anticiparan las elecciones. Afortunadamente, nos encontramos en una etapa de estabilidad”.

-¿Cuántas veces le ofreció José Manuel Soria la presidencia?

“A José Manuel Soria, el primer día que hablamos después de las elecciones, le expuse una situación y él lo entendió o al menos lo aceptó”.

-¿Qué calificativo le merece el comportamiento del ministro José Manuel Soria?

“A él se le atribuye una frase que pronunció y es que iba a incendiar la política canaria. Y lo ha procurado. Más allá de esto, que es legítimo en una contienda política, lo que sí esperábamos de un ministro canario era que el Gobierno de turno pudiera comprender la realidad isleña en directo. Estos días, el PP insiste con grandes palabros en lo de la ruptura con el Estado. Nosotros somos parte de la estructura del Estado; por lo tanto, no vamos a romper con nosotros mismos. Algo distinto es cómo ha roto el Ejecutivo de Mariano Rajoy con Canarias, con un desprecio a las instituciones autonómicas y un catálogo de agravios”.

“Los empresarios deben dejar de creer ese mito de que no hay gente cualificada en Canarias”

-Tras un Consejo de Gobierno reciente, usted compareció y anunció que el Gobierno canario mantendría el presupuesto de Educación, Políticas Sociales y Sanidad. ¿Se podrá incrementar la partida para enseñanza?

“Teniendo en cuenta que el año que viene tendremos menos transferencias del Estado y menor porcentaje de límite de déficit, decir que tenemos un presupuesto que no va a descender significa dos cosas: primero, un compromiso férreo del gobierno con quienes más dificultades están teniendo, y segundo, una política clara con los servicios públicos en esta comunidad”.

-En julio se aprobó la Ley Canaria de Educación, que prevé que el presupuesto sea del 5% sobre el PIB en 2018. ¿Es optimista?

“Yo creo que es razonable que en España, después del retroceso que se ha producido, se pueda ir recuperando paulatinamente el porcentaje de Producto Interior Bruto (PIB) en inversión. El último informe de la OCDE puso de manifiesto una cifra que hoy es muy reveladora. En el año 2011, porque ese informe está referido al curso 2011-2012, cuando llevábamos tres años de crisis, el porcentaje que en España se empleaba de inversión en función del PIB era del 5,5%. En estos tres años de gobierno del Partido Popular el descenso ha sido muy notable, hasta el punto de que hay fuentes que nos indican que estamos por debajo del 4%. Creo que es razonable que nuestro país recupere su inversión en educación, porque es eso: una inversión, no es un gasto”.

-Ahora mismo ¿cuánto es el porcentaje en función del PIB en las Islas?

“Es el cuatro y algo. Creo que estamos en condiciones de alcanzar el objetivo”.

- Familias y ampas se han quejado de que la Consejería recomendó a través de los medios de comunicación no cambiar los libros de texto para evitar el sobrecoste, pero no envió ninguna comunicación oficial y muchos han renovado el material. ¿Es cierto?

“La Consejería no tiene competencias para obligar a todos los centros educativos a elegir unos libros de texto u otros, pero sí hubo un pronunciamiento claro de esta administración para que los consejos escolares, que son los que toman estas decisiones -por lo tanto las familias también están representadas-, no cambiaran los libros. Por varias razones: una razón económica y que afecta a la propia Consejería, porque nosotros tenemos millones de euros en libros de texto que se prestan todos los años; por las propias familias, ya que muchas tienen hijos que pueden heredar libros anteriores; y por otra razón académica: no ha habido tiempo para desarrollar bien los currículos. Pero aún así cada centro es libre de tomar la decisión que quiera”.

- ¿Sabe la Consejería cuántos centros han decidido no cambiar los libros de texto este año?

“No, todavía no”.

- Desde que llegó al cargo una de sus prioridades ha sido incrementar la oferta de Formación Profesional. ¿El siguiente paso sería adecuar la oferta y la demanda? Existen muchos ciclos con exceso de demanda y ciclos donde ocurre lo contrario. Y luego está la capacidad de absorción del mercado..

“El objetivo central de la FP es universalizar la demanda con respecto a la oferta, lo mismo que ocurre en Bachillerato. Desde el punto de vista de los alumnos que vienen por generación, es decir, los alumnos que proceden de la ESO, lo estamos logrando. La cuestión es que hay una demanda extra que viene de aquel alumnado mayor que abandonó los estudios y que ahora necesita formarse. Y ese es un esfuerzo que durará unos años. Ese es uno de los grandes retos que tenemos. El otro, efectivamente, es seguir diversificando la oferta de títulos. Pero lo más importante es que la FP necesita seguir siendo prestigiada y necesita seguir creciendo en número de estudiantes. Eso sí, también es verdad que no tiene sentido que todo el mundo se matricule en las mismas titulaciones. Hay titulaciones que están saturadas, pero no solo porque haya mucha demanda de alumnos, sino porque no va a haber mercado para tanta gente.”

-¿Hay alumnos canarios que se están matriculando en FP porque no pueden pagar la matrícula de la Universidad?

“En Canarias estamos intentando que esta circunstancia no se dé y para eso hemos mantenido y elevado el nivel de becas para los estudiantes universitarios. Incrementamos las cantidades y en cerca de un 50% el número de becarios de las universidades, y además hemos implementado este año una medida novedosa: que toda aquella persona que no pudiera abonar las tasas del título de bachiller o las tasas de la PAU se las abonó el Gobierno. Es una injusticia discriminar a un alumno en nota con respecto a cualquier otro alumno que sí o sí está subvencionado. El 85% del coste de la matrícula universitaria está ya garantizado cobres lo que cobres. Tenemos que actuar sobre el 15% restante. No puede ser que un rico esté con un 5 en una universidad y que el Gobierno de turno le costee el 85% y un pobre con un 5 no pueda porque le falta el 15%. Mi opinión es que también hay otras causas: la FP se ha ido prestigiando y además hay muchas personas que no tienen problemas económicos, pero sí académicos, y han optado por abandonar la universidad”.

-Hace dos años se produjo un importante recorte en el dato de abandono escolar. Tanto que usted llegó a decir que Canarias podría cumplir con el objetivo europeo.
¿Sigue manteniendo esa idea?

“Sí. Tengo mucha confianza en este año. Ahora mismo estamos en un 27% y el objetivo es llegar al 15%, eso significa que hemos bajado ya seis puntos. Pero creo que este año seguramente vamos a estar por debajo del 25%”.

-¿Tiene miedo de que cuando las cosas vayan mejor el abandono vuelva a crecer?

“Es un riesgo, pero ahí está la administración pública para seguir prestigiando la formación y dialogando con los agentes económicos, insistiéndoles en que es negativo que saquen a los chicos de los centros para cubrir puestos ocasionales baratos sin cualificar. Ahora mismo tenemos gente muy formada. Yo les pediría a los empresarios, a los agentes económicos, que confíen y que abandonen ese mito de que no hay gente cualificada en las Islas”.

-La Agencia de acreditación universitaria ha emitido dos informes negativos de la carrera de Periodismo en La Laguna. ¿Hay riesgo de que desaparezcan titulaciones universitarias?

“Es un riesgo que en estos momentos se produce en todo el conjunto de universidades. Periodismo es un lugar donde se ha experimentado una evaluación y se ha encendido un bombillo rojo, pero este proceso de evaluación afectará a todas las titulaciones. Han cogido a la gente, le han atado los pies, le han atado las manos y le han dicho ahora, a correr. No puede ser. Si una de las variables que no se cumplen es la ausencia de un profesorado estable y a tiempo completo, y resulta que no te permiten reponer tasas de profesorado.. ¿cómo corres? El Ministerio tiene que pensarse mucho ese objetivo de suprimir universidades y suprimir universitarios en España, que es lo que está buscando: disminuir en un 30% el volumen de la universidad pública”.

-El discurso del rector Eduardo Doménech en el inicio del curso fue bastante duro con la Consejería. Dijo que si no se aumentaba el presupuesto del centro la sombra de los despidos volvía a planear sobre la Universidad. ¿Habrá despidos?


“Está en riesgo la reposición de la plantilla, pero no por la comunidad autónoma de Canarias, sino por esa norma estatal de la reposición del 10%”

“En absoluto. Las dificultades de la universidad no tienen nada que ver con el Capítulo 1. El dinero que se les envía a una y otra universidad del Capítulo 1 no está en riesgo. Está en riesgo la reposición de la plantilla, pero no por la comunidad autónoma de Canarias, sino por esa norma estatal de la reposición del 10%. Nosotros reconocemos que donde realmente han faltado recursos, y nos hubiese gustado tenerlos, es para la inversión en construcción de nuevos espacios o en remodelación, sobre todo, de nuevos equipamientos”.

-Fue nombrado recientemente secretario de Educación del PSOE. ¿Se ve como ministro en un hipotético gobierno socialista?

“Me gustaría contribuir todo lo posible para cambiar el giro hacia atrás que tiene la educación en toda España, y ese es mi compromiso. Todo lo demás queda fuera de mi alcance”.