El PSOE decide hoy la fecha y el sistema de las primarias para las elecciones de 2015

Una reunión de la ejecutiva regional del PSOE de Canarias. / DA

DOMINGO NEGRÍN MORENO | Santa Cruz de Tenerife

Algunos políticos están dispuestos a hipotecar el presente para ganarse el futuro. Lo malo es que el pasado les pesa demasiado y no pueden soportar la carga. En el PSOE ya ven la luz al final del túnel, pero se ha abierto un debate sobre si es la salida de la crisis de identidad o se trata de eso que denominan experiencia cercana a la muerte.

Esta tarde se reúne en Santa Cruz de Tenerife la ejecutiva regional y está por confirmar que José Miguel Pérez ha contratado de asesor a un parapsicólogo o a un psicólogo -o a los dos- para decidir la fecha de las primarias en Canarias: el 19 de octubre o el 30 de noviembre. Lo más probable es que en el calendario se marque la primera fecha. También se propondrá el sistema de elección, que para los cabildos y los municipios con una población superior a los 20.000 habitantes serán cerradas a la militancia de este partido.

En lo que respecta a la candidatura a la presidencia del Gobierno autonómico se optará, salvo sorpresa mayúscula, por brindar las urnas -Tomás Gómez las ha blindado en Madrid- a los simpatizantes que estén en condiciones de rascarse el bolsillo (dos euros) y de firmar una declaración de afinidad socialdemócrata. Lo contrario sería un escándalo menos explicable que el fenómeno de las caras de Bémez. Al menos en eso coinciden el secretario general, a la sazón vicepresidente, y el pretendiente Gustavo Matos. De momento son los únicos que se postulan, aunque la diputada en el Congreso Patricia Hernández da golpes de fantasma para meter miedo. Sin embargo, Matos no se asusta y la reta a quitarse la sábana. En el entorno del director general de Consumo y Comercio sacan de la lavadora los “trapos sucios” que se airearon en las campañas a favor de Carme Chacón y Eduardo Madina en la pugna por el liderazgo que finalmente ocupa Pedro Sánchez, que el 26 de julio de 2015 probará suerte en la subasta para La Moncloa.