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Acabar la obra del mamotretro, la solución a las riadas en San Andrés

   
Este es el estado en el que quedaría la zona de El Cercado una vez finalizado el proyecto. / DA
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Este es el estado en el que quedaría la zona de El Cercado una vez finalizado el proyecto. / DA

DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz de Tenerife

Seis años y dos trombas de agua de por medio. Ese es el tiempo que las obras del edificio de aparcamientos que se alza a la entrada de la playa de Las Teresitas de Santa Cruz, el bautizado como mamotreto, llevan paralizadas, un tiempo en el que si se hubiera terminado su construcción -como recordaba el edil de Obras y Servicios Públicos, Dámaso Arteaga, en la valoración de daños provocados por la tormenta el domingo- habría evitado la avenida de agua que finalmente inundó San Andrés, al igual que en 2010. Y es que hay que recordar que el proyecto que incluía la creación del mamotreto daba solución al encauzamiento del barranco de El Cercado levantando la autovía de San Andrés por encima del cauce, tal y como estaba previsto en el diseño de Perrault, una solución que, por otra parte, es la única que hasta el momento posee todos los visados de las administraciones implicadas. Así lo indicaba la Dirección General de Costas en el informe solicitado por el Ayuntamiento para ejecutar la obra que liberaría el cauce, recordando la citada administración que la mejor solución para este barranco es la que proponía el proyecto de Perrault; por tanto, aunque autoriza al Ayuntamiento a realizar las obras necesarias para el encauzamiento, señala Costas que estas deberán ser, como mínimo, similares al proyecto que se abandonó.

La obra que ahora asume el Cabildo, según anunció ayer el presidente de la Corporación, Carlos Alonso, tendría por tanto que, si finalmente el mamotreto es derribado tal y como establece una sentencia judicial que ha sido recurrida, alzar una estructura de igual altura que la de los aparcamientos para ejecutar la única solución posible y que ya cuenta con el visto bueno no sólo de Costas, sino también del Consejo Insular de Aguas.

La obra a realizar, que si se utilizara la estructura del mamotreto -como estaba previsto- permitiría su aceleración, viene a incrementar el caudal admisible del barranco, y la sustitución del puente existente sobre el mismo por otro nuevo. En esa intervención también se proyecta un encauzamiento a cielo abierto con nuevo trazado y más anchura y se sustituye la curva actual por un tramo recto. El proyecto, que tiene un coste cercano a los seis millones de euros, de los que el Cabildo ha anunciado que va a poner la mitad, comprende una nueva rotonda, para ordenar el tráfico, con un tramo de vial que enlaza con el nuevo puente proyectado y que cubre, a modo de plaza, el edificio de aparcamientos.

Paralizada desde 2008, esta obra y su polémico edificio de aparcamientos parecen ahora indispensables para el futuro y seguridad del pueblo de San Andrés y sus vecinos.

Alonso es partidario de que no se derribe

EUROPA PRESS | Santa Cruz de Tenerife

Sobre la obra de El Cercado, cofinanciada por Cabildo y Ayuntamiento, Carlos Alonso, el presidente de la Corporación insular, explicaba ayer que se va a acometer independientemente de lo que pase con el mamotreto, inmerso en una causa judicial, aunque personalmente, apoyó que no se derribe y se dedique en el futuro a la construcción de un espacio público.

El edificio de aparcamientos sin terminar sigue a la espera de conocer el recurso presentado por los condenados por la construcción del mismo, al considerar el juez que se levantó a sabiendas de que era ilegal. En ese momento el juez ya informó al primer teniente de alcalde que no había impedimientos para tirar el mamotreto, sin embargo, el Ayuntamiento ha preferido esperar a conocer el recurso y mientras tanto preparar todos los informes para, en caso de derribo, llevarlo a cabo con todas las garantías.

Esa demolición tiene un coste que supera el millón de euros y es la que también encarece el proyecto para encauzar el barranco de El Cercado. El coste total de la obra con el edificio de aparcamientos, se eleva hasta los 5.503.985 euros, mientras que el proyecto alternativo, si finalmente se derriba, sube hasta los 6.567.699 euros, más de un millón de diferencia. Otro dato en contra de su derribo es que no se contempla la realización de aparcamientos sustitutivos, puesto que exigiría más inversión.

Solo la demolición del edificio de aparcamientos supone un coste de 1.155.689 euros, cifra muy alejada de los 500.000 euros dados inicialmente por la Gerencia de Urbanismo.