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Once arrestos por robar móviles en el Sur para venderlos en Añaza

   
Investigadores de Granadilla y Santa Cruz prestaron el servicio. / DA

Investigadores de Granadilla y Santa Cruz prestaron el servicio. / DA

T. F. | Santa Cruz de Tenerife

Operación aluniceros. Bajo este nombre se oculta un notable servicio prestado a la sociedad por agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Granadilla de Abona y Santa Cruz de Tenerife que se ha cerrado con once detenidos por distintas causas.

Se les acusa de cometer al menos dos violentos robos en tiendas de San Isidro (Granadilla de Abona) por el método del alunizaje (fracturar el acceso al establecimiento empotrando un vehículo) para luego revender los objetos robados, concretamente teléfonos móviles de última generación.

Si bien los investigadores sospechan que unos son los autores de los atracos y otros receptadores de los móviles robados, la nula colaboración de los detenidos ha obligado a imputarlos a todos por los robos con violencia, a la espera que la instrucción judicial dirima con mayor exactitud las posibles responsabilidades penales existentes.

Los datos facilitados desde la Oficina de Comunicación de la Comandancia provincial del Instituto Armado detallan que la investigación fue iniciada por el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Granadilla de Abona el pasado mes de febrero, tras detectar que en la referida localidad sureña se habían producido dos robos por ese método en tiendas de telefonía móvil. Los asaltantes actuaban con rapidez y profesionalidad, haciendo caso omiso de los sistemas de alarma y videovigilancia, ocultando sus rostros con capuchas.

Durante el proceso de investigación se pudo comprobar que una parte de los teléfonos móviles sustraídos se usaban en diversos puntos de la Isla, aunque en mayor medida en el barrio santacrucero de Añaza.

Se inició un seguimiento de cada uno de los teléfonos que habían sido activados tras su sustracción, lo que precisó de la obtención de datos de las compañías de telefonía, ubicación geográfica de los teléfonos e identificación de los titulares de las líneas activas. De esa forma se llevó a cabo un “filtro” para intentar determinar qué teléfonos podrían estar siendo utilizados por los autores de los robos y cuáles de ellos ya habrían sido vendidos a terceras personas.

Tras todo ese trabajo de análisis se pudo llegar a concretar qué parte de los teléfonos habían sido vendidos mediante anuncios publicados en Internet, en páginas de compraventa de productos de segunda mano y los compradores adquirieron los terminales por precios muy inferiores a su valor real.
En una segunda fase se procedió a la detención de los restantes usuarios de teléfonos, confirmando todos ellos que éstos los habían adquirido en la vía pública, a chicos de Añaza, lo que llevó a la captura de los autores materiales de los robos.

En total se ha procedido a la detención de once personas, la recuperación de dos turismos sustraídos y la intervención de buena parte de los terminales también sustraídos. De los detenidos, cuatro son mujeres de 22, 26, 42 y 59 años de edad respectivamente, todas residentes en Añaza); el resto son siete varones de 23, 24, 27, 31, 32, 34 y 36 años de edad respectivamente, de los cuales dos son vecinos de la capital, dos de Adeje, dos de La Laguna y otro de La Victoria.