JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife
Dicen que la mejor medicina es la prevención. El Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria (HUNSC), que en agosto fue escogido por la Consejería de Sanidad como centro de referencia en la provincia ante la posibilidad de que apareciese algún afectado por el virus del ébola, continúa realizando simulacros y formando a su personal para afrontar situaciones como las vivida hace dos semanas, cuando se activo el protocolo por un enfermero que había estado con infectados en Sierra Leona.
Según confirmaron a este periódico fuentes hospitalarias, tanto la Consejería regional como la propia Dirección del hospital han decidido crear un equipo multidisciplinar de profesionales, que serían los encargados de asistir a potenciales pacientes contagiados de ébola. Dicho equipo está formado por médicos de la Unidad de Medicina Interna y del Servicio de Urgencias, enfermeros, auxiliares, celadores y personal de seguridad y limpieza. En total, cerca de una treintena de personas permanecerán en alerta mientras continúe la emergencia sanitaria internacional decretada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en junio pasado.
Para evitar que se puedan producir situaciones de riesgo, La Candelaria ha creado además una “zona de alto riesgo” y ha habilitado un “pasillo de seguridad” para asistir a estos pacientes, como así consta en el protocolo de actuación elaborado por el centro sanitario tinerfeño. De igual modo, se siguen realizando simulacros de entrenamiento para el personal del Área de Hospitalización, que sería el encargado de atender a los infectados.
Además de información clínica y virológica básica, el documento define y clasifica los casos según estén en proceso de investigación o confirmados, en base a criterios clínicos y epidemiológicos. También establece una vía de entrada al hospital por Urgencias y la inmediata preparación de las habitaciones de aislamiento.