X
... y no es broma>

Diputados a currar – Por Conrado Flores

   

Según se publicó hace pocos días en diferentes medios, el nuevo líder del PSOE hará a sus diputados ir a los plenos y hasta trabajar el lunes y el viernes. Sí, no eres la única persona que se quedó con esa cara. Ah, pero ¿es que no iban?

En una amenaza más propia de un sargento de los Marines, ha advertido a los suyos que no pueden abandonar los plenos a las 10.00 de la mañana, sólo una hora después de haber comenzado, como la mayoría viene haciendo hasta ahora. Y por si fuera poco, sus 110 diputados estarán disponibles y localizables para los ciudadanos de su circunscripción los lunes o los viernes por la mañana y con un horario fijo. Sin duda una mala noticia para sus pupilos.

Ya en febrero UPyD planteó que la reforma del reglamento del Congreso contemple que sus señorías tengan que fichar. Porque si piensas que la cámara parlamentaria está habitualmente como el día del debate del estado de la nación te equivocas. Está más bien como la sala de un cine durante la proyección de un drama polaco en versión original en hora golfa.

La vida de un diputado activo tiene que ser dura, lo admito. Por lo menos de un diputado que en alguna ocasión se levante y pregunte algo, aunque sea un “señor presidente, cuánto tiempo hay que poner en remojo los garbanzos”. Porque ojo, los ha habido que van a jugar con la tablet o simplemente a echarse una cabezada. En cambio, los que se lo curran, los que están ahí para defender los derechos y mejorar las condiciones de los ciudadanos a los que representan, y que son una minoría, no deben tener un trabajo fácil.

No obstante, el titular de Pedro Sánchez duele a los ojos. Y duele porque desde hace tiempo a los trabajadores nos están apretando las tuercas de un modo que ya estamos soltando humo por la culata. ¡Trabajar de lunes a viernes y cumplir religiosamente con tu jornada laboral! Esa es la exigencia que le hace el secretario general de un partido histórico a sus diputados en pleno 2014, seis años más tarde de la gran crisis económica que aún tiene a España como un solar.

Cuando la Mesa del Congreso decidió hace dos años dejar de reponer gratuitamente las tabletas iPad que perdían los diputados fue sólo el comienzo.