Parecerá imposible fusionar las palabras tormenta y educar. Sin embargo, estando donde estamos, y siendo testigos de que Canarias es proclive a ser golpeada por las lluvias, acompañadas, no por menor virulencia, de viento y aparato eléctrico, quizás ha llegado la hora de promover, en cierto sentido ya se hace, en las aulas la formación en cómo actuar ante una tormenta, y hasta hacer simulacros, en los colegios y los barrios.
En La Laguna, se ha hecho la tarea debida, desde que hace unos diez años, justamente el 31M, le tocara sufrir directamente el embate de las inclemencias, riada, entre otras cosas, que dejo patente que cada vez que llovÃa con fuerza en Aguere se sucedÃan graves problemas. Se han superado los habituales desastres y destrozos de la zona de La Cuesta, como en La Florida y Los Salesianos, Valle de Guerra, aquellas grandes inundaciones en el casco, en la zona del parque de La Vega, en Taco, y los problemas en prácticamente todos los barrios. Asà en estos diez años, desde el grupo de gobierno del Ayuntamiento, han venido trabajando, y salvo la subida de El Cardonal, que ha sido el problema más grave por solucionar, todos los demás han sido eliminados o reducidos, para que en caso de lluvia las molestias sean mÃnimas. El equipo de gobierno actual está atajando actualmente el problema del tramo de la Subida del Cardonal que queda por arreglar para evitar que vuelva a inundarse, como ya han hecho en el resto de la calle.
El trabajo realizado desde la corporación es evidente. La última gran tormenta la sufrimos el pasado domingo, y el lunes gran parte de los espacios dañados, no olvidemos que nuestra orografÃa no puede ser más abrupta, y el agua corre, estaban casi solucionados al completo. Esto hace diez años era impensable.
Es evidente que el sufrir una tormenta, como la del 31M, nos educó en preparar nuestras infraestructuras. Pero ahora queda otra faceta, y es educarnos desde la propia población. No es lógico que ante una tormenta, como esta última, las autopistas estén llenas de coches. Que se pasee por La Laguna como cualquier otro domingo de sol y brillo. En otras ciudades, establecen un protocolo de actuación, y Asociaciones de Vecinos, colegios, y hasta parroquias, prevén qué hacer ante una tormenta. ¿Bomberos, Protección Civil, y policÃa, ya tienen protocolo, pero y los vecinos? DeberÃamos crearlo. No esperemos 10 años.