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El alumbrado público llega hasta La Quinta tras décadas de espera

   
El Consistorio ha comenzado a instalar los 123 nuevos puntos de luz para cumplir con la actual normativa. / DA

El Consistorio ha comenzado a instalar los 123 nuevos puntos de luz para cumplir con la actual normativa. / DA

GABRIELA GULESSERIAN | Santa Úrsula

Una demanda histórica de los vecinos comienza a ser una realidad. El Ayuntamiento de Santa Úrsula ha comenzado los trabajos para instalar el nuevo alumbrado público en La Quinta, en concreto, en la parte más antigua de la urbanización, confirma a este periódico la alcaldesa del municipio, Milagros Pérez.

Debido a la situación de crisis actual, únicamente se acometerán los trabajos imprescindibles para garantizar la seguridad de las instalaciones y la mayor eficiencia o ahorro energético posible, que consisten en 123 nuevos puntos de luz, además del cableado y cuadros de mano. La actuación, que es acometida por la empresa Proyectos y Montajes Ingemont S.A., prevé finalizar en el término de un mes.

“Es una obra necesaria para poder superar los controles, pero no se trata de las mejores luminarias ni de la mejor tecnología dado que ello hubiese supuesto hasta triplicar el coste”, aclara la regidora local. No obstante, la calidad es buena, añade.

Pérez precisa que pese a que esta urbanización sigue siendo privada, en el año 2003 hubo “una recepción tácita de la misma por parte del Ayuntamiento, que cambió el contador de la luz a titularidad municipal”.

No es el caso de La Quinta Roja, la parte nueva de la urbanización, cuyo propietario es Acciona. No obstante, indica que el grupo de gobierno mantiene negociaciones con el grupo promotor, que se habían paralizado en el pasado mandato, y está pendiente “de la aprobación de un convenio urbanístico, que se presentó en la junta del Consejo de Administración de Acciona y se hará lo mismo en el Pleno del Ayuntamiento, con el fin de llegar a un acuerdo y poner en marcha los servicios también en esta zona, previo acercamiento y reuniones con la Comisión de Ordenación del Territorio del Gobierno de Canarias (Cotmac) para no dar pasos en falso”.

La alcaldesa envió un comunicado a los vecinos con fecha 17 de noviembre mediante el cual les informaba del comienzo de los trabajos y les advertía de la posibilidad de que en determinadas zonas se pudieran quedar sin luz “de forma momentánea” como consecuencia de los mismos. Esta actuación, que supone una inversión de 273.000 euros y que fue aprobada en septiembre por la mayoría del Pleno municipal, es consecuencia de las inspecciones a las que está obligado a pasar anualmente el Ayuntamiento por parte de la Dirección General de Industria del Gobierno de Canarias en aquellas instalaciones que superan los 5.000 vatios de potencia.

Tras haber realizado un Organismo de Control Autorizado (OCA) la inspección correspondiente, se concluyó que esta zona requería obras de reforma y legalización urgentes. Caso contrario, en un momento determinado se cortaría el suministro, apunta Milagros Pérez.