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La borrasca se va tras dejar cinco días de lluvia, pero se acerca otra

   
Desembocadura del barranco de Santos, en la capital tinerfeña. / DA

Desembocadura del barranco de Santos, en la capital tinerfeña. / DA

VICENTE PÉREZ | Santa Cruz de Tenerife

La probabilidad de lluvias será hoy en Canarias baja después de cinco días de continuas precipitaciones por una borrasca que aún ayer dejó abundante agua en las Islas. La depresión dejó en la jornada dominical 121 litros por metro cuadrado en Izaña, parte en forma de nieve (llegaron a estar cerradas las carreteras de acceso al Teide), 105 en Tejeda, 50 en Anaga y 48 en la Victoria de Acentejo, como máximas cantidades registradas por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). El viento también fue destacado, y se midieron rachas de 136 kilómetros por hora en las cumbres tinerfeñas, 96 en Candelaria y Vallehermoso, y 87 en el aeropuerto palmero.

El temporal de lluvia y viento provocó una veintena de incidencias durante la noche en la capital tinerfeña, las más importantes relativas a desprendimientos, caída de árboles e inundaciones, según ha informado el Centro de Coordinación Operativo de Emergencias Municipales (Cecopal). Los desprendimientos afectaron a la circulación en la autovía TF-2, sentido sur; en el punto kilométrico 5 y 6 de la TF-12, y en varios tramos de la TF-121, que une San Andrés con Igueste. También en Anaga quedaron afectadas las vías que discurren hacia Los Catalanes y Camino de Perera en Roque Negro.

El viento derribó carteles y árboles en varios puntos del municipio. Lo más importante ocurrió en la calle San Sebastián con Los Molinos y en Los Campitos. Respecto a inundaciones, se anegaron dos carriles en la playa de La Teresitas, y también hubo problemas con la estación de bombeo San Andrés.

En puntos del Norte de Tenerife, como La Victoria y El Sauzal, se produjeron algunos cortes de suministro eléctrico, aunque quedó pronto restablecido. En Fuerteventura las inundaciones obligaron a reubicar las de Urgencias del Hospital General Virgen de la Peña.

La borrasca que desde el pasado miércoles nos ha dado de lleno, ya debilitada y alejada hacia el nordeste del Archipiélago, en confluencia con las altas presiones, dará paso hoy a una jornada de viento fuerte del norte, por lo que la Aemet mantiene activado el aviso amarillo por este meteoro en las islas orientales, y por mal estado del mar además en estas islas así como en La Gomera, El Hierro y el Norte de Tenerife.

Pero apenas se ha marchado de Canarias el mal tiempo cuando se anuncia la llegada de otro centro de bajas presiones desde el Atlántico Norte para el jueves 27, cuando, según el pronóstico de la Aemet, los cielos estarán muy nubosos, con lluvias moderadas, localmente fuertes y con tormentas ocasionales. Una tónica que se mantendrá los días siguientes, incluso hasta el martes 2 de diciembre, en las que son “bastante probables” las precipitaciones localmente fuertes y persistentes.

La explicación de que se pueda repetir esta semana una situación meteorológica similar a la de la pasada se debe a la existencia de un fuerte anticiclón sobre Europa, que impide la circulación normal de los centros de baja presión, de oeste a este, por lo que estas masas de aire inestables tienen a bajar en latitud y acercarse a Canarias.

La nueva perturbación que, según el pronóstico oficial, se colocará entre Canarias y el Golfo de Cádiz a partir del jueves, puede traer consigo nuevas nevadas en las cumbres, al venir acompañada de aire muy frío en altura, por lo que habrá que estar atentos a la evolución de esta depresión en las próximas horas.

Antes de ese nuevo periodo de mal tiempo, hoy y mañana serán días de transición, tan solo con lluvias débiles al norte, que podrían aumentar de intensidad el miércoles, sin que se descarten en otras vertientes.