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Carlos Alonso: “Desde el Cabildo tenemos que cambiar el chip de invertir en cosas por el de hacerlo en personas”

   
Carlos Alonso Entrevista Multimedia

Carlos Alonso y Carmelo Rivero durante la ‘Entrevista multimedia de DIARIO DE AVISOS’. | DA

CARMELO RIVERO | Santa Cruz de Tenerife
Fotos: DA

El nacionalista Carlos Alonso responde con aplomo y parece alguien que busca un espacio y un lenguaje en el campo minado de la política. En sus declaraciones asoman algunos mantras evidentes en esa búsqueda de estilo. Esta serie de Entrevistas Multimedia del Grupo DIARIO DE AVISOS se inicia con el presidente del Cabildo de Tenerife.

-¿Se siente cómodo en la política?
“He estado siempre vinculado a la gestión del interés general, aquí o en Bruselas, como funcionario. Me gusta, Tenerife es mi tierra. Es un reto apasionante”.

-Un alto funcionario de la Comisión Europea, que lo deja por la política. ¿Cree que un día nadie querrá hacer ese viaje?
“Es verdad que la política se está convirtiendo en un terreno peligroso, que puede no apetecer a alguien con una buena remuneración. Pero tenemos que pelear para que sea una profesión digna”.

-“Lo importante es ser persona, lo demás no interesa”, extraigo de su primer discurso en el cargo. ¿Cómo lleva la impotencia de no poder solucionar problemas que resultan acuciantes?
“Soy una persona muy ansiosa, amiga de soluciones inmediatas, pero he de actuar con una perspectiva de medio y largo plazo. En empleo la clave es la formación. El Cabildo tiene que cambiar el chip de invertir en cosas por el de invertir en personas”.

-Concrete cómo.
“Tenemos recursos y capacidad para que los chicos y chicas de Tenerife tengan una formación más completa en idiomas, internet y nuevas tecnologías. En 10, 15 años, apoyando a la Universidad, podremos salir no solo de esta crisis, sino de las que vengan, con más garantías”.

-Sus hijos, de 5 y 9 años, integran la generación de la próxima década 2020-2030. Usted habla inglés y francés. ¿Fue obra de sus padres?
“Mis padres me educaron en un colegio que no era bilingüe. En Tenerife, salvo el Colegio Alemán, ningún otro centro lo era. Estudié en el Hispano-Británico, que tenía una formación en inglés importante, y, por mi propia vocación en los temas comunitarios, estudié el francés ya en la universidad. En el entorno familiar se me educaba a ser muy exigente. La formación de los hijos es clave para el futuro de Tenerife. Tenemos que desarrollar en la Isla escuelas de padres. José Antonio Marina decía hace poco aquí que hay que hacerlo en momentos delicados como los actuales”.

-¿Cómo influyeron sus padres en usted?
“Éramos una familia numerosa, cinco hermanos y una época distinta. Mi padre tenía una empresa familiar de comercio y se me educó en ayudar en casa, trabajar y aprobar con buenas notas. Mi madre gestionaba la casa y estaba siempre presente, una persona muy sacrificada por nosotros”.

-¿Políticamente, su padre es Ricardo Melchior?
“Sí, es quien me reenfoca hacia la política. A él le debo ese trampolín y tengo que agradecerle la oportunidad”.

-Empezamos hablando de la adversidad de la política. ¿Cómo asiste al episodio judicial de Fernando Clavijo?
“Fernando Clavijo ha reaccionado bien. El momento es duro para él, porque en lo personal a nadie le agrada que lo señalen. Pero ha hecho lo que la gente espera: abrirse, decir esto es por esto, la información es esta y los casos que se están investigando son estos. Obviamente, hay dificultades que él tiene que seguir afrontando, dar toda la información que le falta al juez para que termine viendo que no existe razón para mantener la imputación, que es lo que yo espero que pase en breve. Pero es duro, uno se pone en la piel de él, como responsable público, y piensa que la política tiene esos riesgos”.

-¿Estar imputado y no estarlo es condición sine qua non para estar o no en política?
“Eso pasa mucho por la situación personal de cada uno. Hasta que no concluya, en mi opinión, no es posible decir si una persona es culpable o no. Entra dentro del ámbito exclusivamente personal. Los demás no podemos juzgar su posición. Es la justicia la que va a determinar en qué posición final está. Es cómo cada uno se siente frente a los demás. Esa es mi valoración. Es un tema ético. La ética es personal y no tiene que ver con lo que piensan los demás”.

-El 1 de enero se lleva usted la joya de la Corona: el Teide.
“Espero que sea así. El Gobierno se ha comprometido al traspaso y vamos a darle brillo a la joya”.

-Apelo al economista. ¿Por qué nos cayó encima esta bomba, la de la crisis?
“Vivíamos una ilusión económica. Cuando uno tiene un billete de 50 euros, eso es una ilusión. Llega un momento en que esa ilusión colectiva la pinchan, cae Lehman Brothers, y estamos sobreendeudados, lo que todavía lastra el crecimiento”.

En el petróleo se han puesto por delante los intereses de una multinacional”

-Salir de pobres, le oí decir.
“Sí, eso lo dije para el sector cultural”.

-¿Cómo está de saneado el Cabildo?
“En los últimos cuatro años, hemos reducido mucho el endeudamiento, y ahora y en 2015 duplicamos la inversión”.

-¿Cómo hace papá Cabildo para tener dinero?
“Como en la casa de cada uno, si recibes unos ingresos y tienes unos gastos estructurales pequeños, pues tienes muchos recursos. La Isla ya tiene buenos equipamientos, ahora nos interesa la inversión en personas”.

-Estuvo con Stephen Hawking, una mente laboriosa, en un cuerpo paralítico, pero sonríe. ¿Le resultó una lección de vida?
“Más allá de lo que nos aportó con su presencia en el Starmus, estaba eso que señalas, la capacidad de superación de la mente humana, en circunstancias tan difíciles, capaz de la alegría. Como dijo en su conferencia en el Auditorio, de todos los agujeros negros se sale”.

El agujero de Hawking
Continuamente nos repetimos que los tecnócratas no tienen carisma. A Ricardo Melchior le retrasaban el reloj de la presidencia del Cabildo aduciendo en su partido que tenía un perfil muy técnico. Me acordé de aquella falacia cuando Carlos Alonso entró en el plató de Mírame, sin corbata. Le persigue el mismo prejuicio. Hizo el viaje de Europa a la isla, de un puesto de alto funcionario en la Comisión a la política local, a comienzos de siglo, y en la entrevista le sugerí que ese viaje pronto podría resultar inverosímil. En los días de Bruselas, en que conoció a Jacques Brel, iba para economista europeísta, era un fan de la canción belga en busca de letra y música propias en su vida, y pronto integró una diáspora de canarios con porvenir de la que no siempre se vuelve si se hace carrera. Pero volvió al delfinario. Melchior ya insinuaba entonces que Alonso era el siguiente en la línea sucesoria. Como un estribillo, este hombre con fama de estratega, Carlos Enrique Alonso Rodríguez (el nombre compuesto, al parecer, es cosa del padre) repite: formación, formación, formación. Quiere multiplicar las becas del Cabildo y fomentar el bilingüismo. Suena bien en medio del drama democrático presente, de la crisis y de la baja cualificación, en fin, de la cuenta atrás hasta el oráculo de las urnas. Y ahí cobra todo el significado la cita que hace de Hawking: “De cualquier agujero (negro) se sale”.

-Tomo una cita suya del papa Francisco: “Hay que rehabilitar la política”. ¿Pactaría con Podemos?
“Es una frase a raíz de unos documentos de los obispos franceses sobre el papel de la política y habla de la participación. Políticos debemos ser todos. A veces los políticos nos hemos acostumbrado a no contar con la gente, era muy cómodo, y como la cosa iba bien, la gente tampoco participaba. En lo que me quiero distinguir del fenómeno de Podemos es en no utilizar la frustración para dinamizar la participación, sino en que sea la ilusión. La propuesta de Visionarios, Gobierno Abierto o Barrios por el Empleo son procesos de participación vinculados a la ilusión, no a la frustración”.

-¿Pactaría con Podemos?
“Yo creo que todos en la escena política debemos hablar y no cerrar puertas”.

-¿Usted miraría debajo? Sabe a lo que me refiero. ¿Buscaría el petróleo?
“No lo haría si una gran parte de la ciudadanía no estuviera de acuerdo. Trabajaría en buscar ese acuerdo. Se han puesto por delante los intereses de una multinacional e, incluso, los políticos. Los grandes temas europeos se decidieron siempre en Canarias por acuerdo”.

-Vinos, Sinpromi, carreteras en la Fiscalía. ¿Son casos que pudieron evitarse?
“El sistema funciona, a veces el problema son las personas. Siempre hay algún loco que circula por el carril contrario. Necesitamos mecanismos para controlar a quienes se saltan las normas y una sociedad que repruebe desde pequeños esos comportamientos. Lo que nosotros hemos hecho es transparencia y colaborar con la policía y la justicia para que detuvieran a la persona que había robado. El caso de los vinos es una práctica legal, pero inadmisible: la cultura del Cabildo es proteger los caldos locales. Importar vino barato procedente de la Península va en contra de eso”.

-Se va a dar de baja el Cabildo de Bodegas Insulares?
“Cuando haya una denominación de origen de toda la Isla, Tenerife, y los consejos reguladores se unifiquen”.

-Estuvo con Clinton en Nueva York…
“Sí, con dos proyectos muy interesantes: el de la lucha contra las enfermedades tropicales y la obsesión del Cabildo, las telecomunicaciones, para la costa occidental de África. Nos han aprobado los dos. Dos buenas noticias para Tenerife”.

No tengo con Paulino Rivero la complicidad que sí tengo con Fernando Clavijo”


-¿Vendrá Obama?
“Antes de concluir la presidencia es complicado. Pero no hay que descartarlo después”.

-¿Ha cursado ya la invitación?
“Sí. Pero, como con Clinton, no es sentarte en Nueva York, sino sacar proyectos”.

-¿Traería al papa Francisco?
“Por el papel que está desempeñando en el cambio de la sociedad occidental, sería una buena figura para traerla a Tenerife”.

-Tenerife es una isla que quiere ser líder turísticamente…
“Bueno, ya lo es…”.

-El sol y el Teide los tenemos, ¿qué nos falta?
“Para que el turista viva una experiencia de vacaciones única y repita, necesitamos, además de clima y planta hotelera, una buena actividad de ocio. Estados Unidos es un mercado a medio plazo y, por su clase media, África: Marruecos, Nigeria, Senegal…”.

-¿Usted los habría metido en un camión de basura? Hablo de los inmigrantes de Maspalomas en mitad del miedo al ébola.
“Lo fácil es decir que no; sinceramente, no conozco en detalle las circunstancias. El miedo al ébola no te debe paralizar”.

-El ébola puso a prueba nuestra Sanidad.
“Y se respondió bien, comparándonos con Madrid o Estados Unidos. Tenemos buenos profesionales e infraestructuras. Pero también cuellos de botella como las Urgencias, que exige una inversión importante en el HUC y La Candelaria, abrir (como ha hecho el Gobierno de Canarias con nuestro empujón) en el norte y la mejora que vamos a tener en el sur. Y hay que reflexionar sobre la sanidad de los mayores, que es el gran debate de los próximos cinco años”.

-¿Se considera cercano o distante del presidente Paulino Rivero?
“Vivimos en mundos distintos, desde el punto de vista de formación, generacional y hasta de escenarios políticos. Yo llego a la política en un momento distinto al suyo y veo que no tenemos una complicidad, como la que sí tengo con Fernando Clavijo. Pero valoro mucho el esfuerzo que ha hecho Paulino Rivero en estos ocho años y creo que dentro de unos años se le reconocerán muchas cosas que ha podido hacer en una época tan complicada. Tocaban tiempos de cambio. Aposté mucho por la figura de Fernando Clavijo dentro del partido y creo que hemos acertado”.

-¿Es verdad que quiere crear una Orquesta Sinfónica de Tenerife infantil?
“Es una manera de hacer que la Orquesta y el Auditorio salgan de las cuatro paredes y estén en las familias. La cultura es invertir en personas”.

-Quizá porque hablamos de niños, le hago la siguiente pregunta. ¿Es verdad que Tenerife va a tener una fábrica de chocolate ruso?
“Sí, los rusos tienen un proyecto, que ya está en la fase administrativa de permiso, en la Dársena Pesquera. Es el principal productor de una marca famosa en Rusia, que gracias al concurso del puerto, el Ayuntamiento, el Cabildo y la Zona Franca, hemos conseguido que venga. Eso es Why Tenerife?, la marca de la isla”.

-¿Para cuándo habrá boda con el anillo insular?
“Por lo menos ya estamos en la fase del compromiso. A corto plazo se abre el tramo sur. Entre Icod y El Tanque ya hemos visto el impacto en ahorro de tiempo. Nos faltará el tramo entre Santiago del Teide y el Tanque, el túnel de Erjos, que vale 200 y pico millones de euros; es mucho dinero, el Estado nos ha recortado. No voy a protestar ahora, pero la próxima obra que se licite con cargo al convenio de carreteras por parte del Gobierno de Canarias en Tenerife tiene que ser esa. Tenemos que completar el anillo”.

-¿Por qué tantos rodeos para cambiar el horario del aeropuerto del Norte?
“Lo ampliamos una hora y media y ha generado una nueva base aérea de la compañía Vueling, cuyos aviones duermen aquí. Demuestra que hay que pelear, currar para que las cosas ocurran”.

-Defina con una palabra su primer aniversario al frente del Cabildo.
“Compromiso”.

-¿Juega algún número de lotería?
“Cualquiera, ninguno en particular”.

-¿Qué desea a los tinerfeños, ricos o pobres, para el nuevo año?
“Ilusión. Levantarse todos los días diciendo, hoy creo que vamos a poder hacer algo”.

-Claro que para el rico es más fácil la ilusión que para el pobre.
“No lo sé. A veces, a un niño al que le das todo, a lo mejor no tiene ilusión por las cosas. Como somos muchos los que no tenemos todas nuestras necesidades cubiertas, creo que es fácil para el pueblo de Tenerife tener ilusión. No se trata solo de papá Cabildo o el presidente del Cabildo, que lidera nada o que protagoniza nada. Yo creo que esos tiempos ya han pasado. Hace falta ilusión, no frustración y escucharnos. En España la gente no se escucha, y no cambia de posición. Ilusión y capacidad de escucharse para, de esa manera, poder construir entre todos una nueva isla”.