X
crítica >

‘La cuadratura del círculo’, de María Ángeles Teixeira – Por Joaquín Castro

   

Un nuevo libro de poesía de María Ángeles Teixeira Cervía ha visto recientemente la luz en el Real Casino de Tenerife. Su título La cuadratura del círculo, editado por Idea. La poeta, una vez más, nos da a conocer con este ejemplar de bolsillo sus ideas poéticas, su manera de pensar y lo que quiere decir con su propia filosofía, de sus vivencias, de su andar por la vida, siempre con pie firme.

La soledad de los seres humanos, las angustias que hoy día se viven por tantos acontecimientos, de las guerras, de las muertes, de lo que llega a producir una mala noticia que lees en el periódico te cuenta y te dice: “La soledad es ancha como Castilla, no hay cielo, no hay mar, no hay horizonte. Cuando sopla el viento sobre el erial y bajan las nubes y abren sus odres, descargan lágrimas negras entre los párpados”. Otro de sus pensamientos, cuando piensa en la parodia del mundo y de los gatos: “El mundo está lleno de gatos. Gatos famélicos. Gatos gordos. Gatos enamorados. Gatos irascibles. Gatos, gatos, gatos. Y… gatos con botas”.

El libro de Ángeles Teixeira, Angelita para todos sus amigos, está lleno de buenos pensamientos, de similitudes con la vida: “El tranvía va por un río de hierros. Sobre el asfalto. El alma está hecha de chispas de luz. Y sin ésta su cuerpo es un muñeco. Un juguete inservible con las piernas rotas”. Pero también en estos pequeños poemas hay libertad, hay alegría, podemos encontrar una perla que a veces ni imaginamos. Esto es lo que le ocurrió al “mirlo negro con un túnel, abrió su garganta y salió un diáfano brillante tallado”. En sus páginas una denuncia titulada SOS, se busca a una cantante español que no cante en inglés. Se gratificará espléndidamente. ¡Qué pensamiento tan del momento, cuando parece que cantar en español no es de recibo!

En La cuadratura del círculo, uno de sus poemas libres lo dedica al mar, ella siempre ha sido una poeta del mar: “Quiero el mar, lo quiero entero, con voraz glotonería, deseo nutrir mi ser de su esencia”.

Ángeles, Angelita para los amigos, es investigadora, narradora, licenciada en Derecho por la Universidad de La Laguna, periodista, miembro del Instituto de Estudios Canarios de Santa Cruz de Tenerife y de la Real Sociedad Económica de Amigos del País, Hidalga de Nivaria. Ha reeditado recientemente parte de su extensa obra narrativa, como Los demonios de la distancia, Los oscuros rincones de la gloria, El sabor del pomelo, Los malos sueños. Su primer libro que le conocí fue La sílaba secreta y luego Cuerpo de amor. Le seguirán muchos título como Proceso a Cagigal, que fue Premio Ciudad de La Laguna en 1989, y más tarde la novela Paulina, por su argumento, que se desarrolla en Buenavista del Norte. Por último, Las caras de la luna, su autobiografía, sus periodos de niña en un colegio de monjas hasta su etapa universitaria que culminaría con su licenciatura de Derecho.

Con esta nueva entrega de María de los Ángeles Teixeira se nos descubre como una poeta modernista, en la que la sátira, la denuncia social, la ironía y hasta la lírica se dan la mano en unos poemas llenos de ternura.