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El PSOE se suma al PP en sospechar de contrataciones

   

VICENTE PÉREZ | Santa Cruz de Tenerife

La Comisión de Control parlamentaria de la Radio Televisión Canaria (RTVC) volvió a ser ayer un disparadero de sospechas sobre contrataciones del director del ente, Guillermo García, entre ellos los 2,3 millones de euros pagados a Amanecer Latino, la productora de Francisco Padrón, o los 1,4 millones a Siete Mares.

La novedad esta vez fue que la portavoz socialista, Belarmina Martínez, anunció que, al igual del PP, revisará con lupa la contratación de programas entre 2007 y 2009 y pedirá, en su caso, que “se depuren responsabilidades” no sólo en la dirección de la RTVC sino en la Consejería de Hacienda, que debía fiscalizar estos gastos, época, recordó, en que era consejero el hoy ministro del PP José Manuel Soria.

“El PSOE rechaza de plano este tipo de contrataciones, con cantidades tan elevadas para producciones que luego se quedan en un cajón o se emiten de madrugada; decisiones con productoras que parecen ligadas a intereses empresariales de unos pocos; y eso es inaceptable e incomprensible”, advirtió Martínez.

Pregunta sin respuesta
Sus palabras sorprendieron al azote de García, Águeda Montelongo (PP), que preguntó al director de la RTVC, sin obtener respuesta, “si ha trabajado o colaborado en algunas de las empresas de Francisco Padrón o aquellas que llegó a dirigir”. Insistió la diputada en que a Amanecer Latino se le pagaron 228.000 euros por 52 entrevistas con deportistas canarios emitidas de madrugada.

En su defensa, García argumentó que una cosa es el valor y otra el precio, pues “los programas de televisión son productos artísticos basados en el talento, únicos, exclusivos, irrepetibles”, y se preguntó “¿qué valor tiene la camiseta de un ídolo o una botella de agua en el desierto?”. Recordó, con sarcasmo, que “el máximo responsable de contenidos y de programación era Carlos Taboada, puesto por el PP”. Y tachó de “gravísimo” que se cuestione al propio Tribunal de Cuentas del Estado, que archivó las diligencias sobre los contratos citados ayer “al no apreciar responsabilidad contable”.