Creada en el año 1988 y reorganizada en 2000, el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil tiene asignada la misión de evitar agresiones al medio ambiente y la protección de muebles e inmuebles catalogados como bienes del patrimonio histórico en todo el territorio nacional español y en su mar territorial, incluida la preservación de las especies protegidas y amenazadas. Su base de trabajo es muy extensa, ya que sus agentes deben trabajar con más de un millar de leyes y decretos, siendo la especialidad del Instituto Armado que más legislación maneja. Además, se trata de la única policía judicial verde de Europa, y organizaciones ecologistas como Greenpeace, WWF Adena o SeoBirdLife reconocen su gran importancia.
En lo que va de año, y hasta el pasado 30 de septiembre, el Seprona contabilizó en la provincia de Santa Cruz de Tenerife un total de 1.051 infracciones, la mayor parte de las cuales acabaron en denuncias e imputaciones para los responsables de las mismas. En concreto, según datos facilitados a este periódico por la propia Guardia Civil, los delitos más numerosos fueron los que atentaban contra la normativa sobre residuos y vertidos (220), seguidos de los referidos a la pesca ilegal (149) y los vinculados a urbanismo y ordenación del territorio (122).
De igual modo, las infracciones a la normativa sobre sanidad animal y epizootías constituye uno de los campos donde el grupo de protección ambiental de la Benemérita también llevó a cabo más actuaciones, con un total de 106 en los nueve primeros meses de este año.
En la orilla opuesta, siempre según los datos ofrecidos por la Comandancia de Santa Cruz de Tenerife, en lo que va de 2014 no se han realizado actuaciones por sacar del territorio bienes del Patrimonio Histórico Cultural ni tampoco sobre importaciones, exportaciones, comercio, tenencia o circulación de especímenes, fauna y flora silvestre protegida. En cambio, el Seprona sí registró 32 infracciones a la normativa sobre animales peligrosos y 42 sobre animales de compañía, además de una vinculada a razas caninas peligrosas. Una de las actuaciones más relevantes en lo que a especies exóticas invasoras fue la llevada a cabo por el equipo del Seprona con base en Garachico, que levantó 10 actas de denuncia a una tienda de animales de La Laguna, que ofrecía a través de Internet varias serpientes asiáticas y americanas, geckos de Madagascar y hasta un varano, por precios superiores a los 150 euros. Los agentes comprobaron el mal estado en que se encontraban los ejemplares intervenidos, que quedaron en cuarentena en el Centro de Recuperación de Especies La Tahonilla.
El Servicio de Protección a la Naturaleza de la Guardia Civil también presta especial atención a todos aquellos delitos sobre costas, acampadas y alojamientos turísticos, muy habituales en el Archipiélago. En el primer caso, en lo que va de año se han cometidos 59 infracciones, mientras que en lo que se refiere al ámbito turístico se han notificado un total de ocho denuncias.
Mientras, también se contabilizaron 73 faltas por incumplir actividades clasificadas, como la que cometió una página web que supuestamente ofertaba un espectáculo con la posibilidad de bañarse con delfines y leones marinos en un recinto del sur de Tenerife. En la citada página ni siquiera constaba ningún dato sobre la localización del recinto donde se realizaban las exhibiciones, ya que los interesados debían acordar por teléfono o a través de su hotel un punto de encuentro, desde donde eran trasladados al lugar por el responsable de la actividad.
-La amplia variedad de intervenciones que ha realizado en lo que va de año en Santa Cruz de Tenerife el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, ha dado como resultado más de un centenar de imputaciones y detenciones por delitos relacionados con el medio ambiente. Entre los más significativos están las diligencias abiertas a un individuo en La Palma por atentar contra los recursos naturales. En esta misma isla, y en colaboración con la Viceconsejería de Pesca, se interpusieron 17 denuncias por marisqueo ilegal.
-En la isla de Tenerife, en cambio, uno de los casos más destacados destapados por el Seprona fue el de un vecino de Los Realejos que supuestamente maltrató hasta matar a una perra de raza podenco canario en avanzado estado de gestación. En Santa Cruz, mientras, la Guardia Civil detectó varias infracciones vinculadas a animales exóticos y silvestres, y recuperó, entre otros, un búho, seis cotorras alejandrinas, un loro de cola gris y más de una veintena de reptiles, todos ellos introducidos y vendidos ilegalmente en tiendas y por Internet.
-De enorme trascendencia fue también la denuncia administrativa elaborada por el Seprona contra Tragsa, con ocasión de las distintas denuncias y la alarma social generada a raíz del abandono por caminos y senderos de la isla de La Gomera de animales abatidos con ocasión del control de especies llevado a cabo por el Cabildo insular a través de la citada empresa.