X
el Diván >

Atentos a las señales del acoso escolar – Por Tamara de la Rosa

   

No se trata de un par de encuentros violentos ni discusiones entre niños, sino de un maltrato intimidatorio o agresiones repetidas a lo largo del tiempo que, a parte de las numerosas consecuencias psicológicas que sufre la víctima, en muchos casos han llegado al extremo del suicidio, como hemos podido ver y oír en muchos medios de comunicación. No solo hablamos de acoso escolar cuando existen agresiones físicas. Ese, simplemente es el maltrato físico, pero no debemos olvidar el maltrato verbal, que es el más habitual y el que mas huella deja ya que mina a la autoestima. Insultos, humillaciones, motes, rumores falsos, desprecios en público.

Maltrato Psicológico. Aquí nos referimos a las intimidaciones. El acosador pretende dar miedo a la víctima para conseguir sus fines.

Maltrato Social. El más olvidado y no menos importante. La exclusión, el aislamiento. Lo que coloquialmente llamamos “hacer el vacío a alguien”.

Lamentablemente, en España, son muchísimos los niños y jóvenes que, en silencio la mayoría de los casos, sufren acoso escolar o bullying.

Desafortunadamente, hay niños/as que desde muy corta edad aprenden que cuanto mayor sea la violencia, mas fácil les resulta manipular, controlar y dirigir a otros. Que a mayor violencia, menos le contradicen, consiguiendo así ser “los amos/as del recreo”, los auténticos líderes. Normalmente, tienen un perfil que destaca por ausencia de valores, ausencia de normas de convivencia. Menores que reciben castigos a través de la intimidación. En resumen, aprenden a solucionar problemas por medio de la violencia. Estos niños/as y jóvenes también acaban sufriendo, ya que al final, son rechazados como agresores por una conducta que han aprendido desde pequeños como normal. Por otro lado, están también los agresores que no tienen este perfil, pero que se unen a ellos como defensa, como estrategia para evitar ser víctima del maltrato, llegando a actuar de la misma manera. Con diferente intención pero con los mismos comportamientos y actitudes agresivas.

Algunas pautas para los padres son:
1. Los niños que sufren acoso encolar suelen sufrir callados mucho tiempo, pero se pueden observar determinadas señales de alarma. Si tu hijo nunca ha tenido problemas para ir al colegio y de repente presenta miedo por ir a éste, evita actividades con compañeros (cumpleaños, excursiones), suelen intentar no ir a clase de gimnasia ya que allí hay menos control, comienza a presentar quejas y malestar físico antes de ir a clase, problemas para conciliar el sueño, cambios de comportamiento (suelen volverse niños retraídos), debes indagar. Empieza a fijarte si llega con algún morado en el cuerpo. Si le falta dinero, material o si viene con algún cambio de zapato u otro tipo de prenda.
2. Hazle sentir protegido, que puede confiar en sus padres y que juntos solucionaran el problema.
3. Préstale atención a sus miedos y preocupaciones sin restarle importancia. Evitar comentarios tipo “eso son exageraciones”, “¿y por qué te dejas?”. No le juzgues.
4. Evita fomentar la violencia. Piensa que son niños que padecen este acoso callados durante mucho tiempo. Pueden aprender que para ser respetados han de ser violentos y si en casa se le refuerza este mensaje, puede tener consecuencias negativas.
5. Importante saber que la Ley hace responsables al colegio de proteger al menor de cualquier tipo de acoso escolar o maltrato. Si su hijo lo sufre, debe exigir al colegio que tomen medidas de protección hacia la víctima, así como que sancione a los agresores. En caso que el colegio no tome estas medidas, deberá denunciarlos por omisión de responsabilidad.
6. Enséñele que para tener amigos no hay que aguantar un maltrato por parte de ellos. Incúlquele que si se unen con gente que les trate bien, quizá no esté en el grupo de personas más populares, pero que lo pasará bien y lo más importante, no sufrirá, mostrándose tal y como es.

Si su hijo/a es víctima del acoso escolar, no dude en poner en conocimiento al colegio, hablar con padres de los agresores y pida ayuda profesional. Hay huellas psicológicas que influyen en la personalidad, que no desaparecen con el paso del tiempo si no son tratadas por un especialista.

*PSICÓLOGA
tamaraconsulta@gmail.com