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Arabia Saudí escenifica el relevo tranquilo en el trono tras la muerte de Abdalá

   

Reuters / EP | Riad / Madrid

El fallecimiento del rey Abdalá bin Abdelaziz de Arabia Saudí a los 90 años de edad ha supuesto el ascenso al trono de su hermanastro Salman bin Abdulaziz al Saud, hasta ahora ministro de Defensa del país.

Salman, de 79 años de edad, fue previamente gobernador de la provincia de Riad entre 1963 y 2011 y es una de las figuras más poderosas del reino, conocido por ser uno de los integrantes de los siete sudairis. Este grupo está integrado por los siete hijos que tuvo el fundador del Estado moderno saudí, Abdulaziz ibn Saud, con una de sus mujeres favoritas, Hassa bint Ahmad al Sudairi, miembro de una familia de la influyente y religiosa región del Nejd, clave en la formación de Arabia Saudí. De hecho, la madre del fundador de Arabia Saudí era también una Sudairi.

El padre de Hassa, Ahmed bin Mohamed al Sudairi, fue un firme aliado de Ibn Saud durante una de sus últimas ofensivas militares para unificar los territorios que controlaba y finalmente proclamar el nacimiento de Arabia Saudí.

Los lazos entre ambas familias se han extendido con el paso de los años, y algunas hermanas menores de Hassa han contraído matrimonio con otros hijos de Ibn Saud. Es el caso de Muhdi bint Ahmed, que se casó con Nasser bin Abdulaziz, y Sultana bint Ahmed, que fue la primera esposa del rey Faisal.

Los siete sudairis son Fahd, Sultán, Abdul Rahman, Nayef, Turki, Salman y Ahmed, de los que solo cuatro siguen con vida. De ellos, Fahd y Salman han conseguido acceder al trono, si bien todos ellos han ejercido una gran influencia en la vida política del país en las últimas décadas. Su ascenso al poder se escenificó con la entronización de Fahd en 1982, si bien el clan había ganado prominencia durante las disputas entre Saud bin Abdulaziz al Saud (1953-1964) y Faisal bin Abdulaziz (1964-1975), que se apoyó en los sudairis para aumentar su base de respaldo.

Paralelamente, la llegada de Salman al trono de Arabia Saudí ha dejado como heredero al príncipe Muqrin bin Abdulaziz, el hermanastro más pequeño del nuevo monarca y considerado una figura relativamente liberal. Muqrin ocupó durante casi 20 años la jefatura de la provincia de Hail antes de pasar, en 1999, a la de Medina.