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El oleaje hunde al viejo velero turístico de Los Cristianos

   

el galeón

T.F. / J.M. | Santa Cruz de Tenerife

Adiós al velero de Los Cristianos, el Olimpyc. Llegado como reclamo turístico hace al menos más de dos décadas, poco a poco su imagen se convirtió en algo común a los millones de personas que, por una causa u otra, podian observarlo fondeado en el puerto aronero, al punto que la estampa se convirtió en familiar para, por ejemplo, cualquier usuario habitual de la transitada vía marítima con La Gomera.

La decisión de hundir el Olimpyc se adoptó a última hora de la tarde de ayer y se ejecutó minutos después de las once de la noche. La seguridad de la instalación es lo primero y basta con observar la fotografía que acompaña estas líneas para comprobar que a duras penas se mantenía a flote.

En realidad, el naufragio del Olimpyc viene de antiguo. Algunos lo recordarán de su etapa como barco pirata, y desde luego participó en la entusiasta flotilla que día sí y día también molestaba. cargado de turistas, a la colonia de calderones residentes entre Tenerife y La Gomera, un desmán al que finalmente tuvo que poner coto el Gobierno de Canarias. Lo de velero, por decir, ya que desde luego tiraba de motor para pasear a sus clientes.

Desde hace años, simplemente servía como residencia nocturna de su propietario, quien cada cierto número de horas debía de arrancar la máquina de achicar que evitase un despertar más húmedo de lo aconsejable.

El poderoso oleaje de esta semana fue demasiado para el Olimpyc, y ahora empieza su nueva etapa como hogar de la fauna marina. El viejo velero turístico de Los Cristianos ya es un pecio más.

La embarcación horas antes de ser remolcada

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