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El personal del Lago de Martiánez llega a un acuerdo y acepta el ERTE

   
Los 35 empleados afectados trabajarán a jornada completa entre el 15 de julio y el 15 de septiembre. | M.P.P.

Los 35 empleados afectados trabajarán a jornada completa entre el 15 de julio y el 15 de septiembre. | M.P.P.

GABRIELA GULESSERIAN | Puerto de la Cruz

Tras casi un mes de negociaciones los trabajadores y la empresa que gestiona los bares y cafeterías del Lago Martiánez, en Puerto de la Cruz, han llegado a un acuerdo que le permite a esta última iniciar un Expediente Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que afecta a 35 de los 50 empleados que realizan su jornada laboral en las instalaciones de ocio.

Así lo confirmaron a este periódico fuentes de Intersindical Canaria, representante del personal, quienes añadieron que la medida se puso en marcha ayer y tiene vigencia hasta febrero de 2017, aunque en el periodo comprendido entre el 15 de julio y el 15 de septiembre los afectados volverán a trabajar a jornada completa con motivo de la temporada alta y las vacaciones.

El resto de los meses cada empleado experimentará una reducción de la jornada entre un 24% y un 40 %. Los más perjudicados son 13 de ellos “porque la reducción está en torno a un 50 % y por ello consumen más prestación por desempleo”.

El acuerdo se ha podido alcanzar porque la empresa “ha implementado, de forma voluntaria, una serie de mejoras para la plantilla que no estaban contempladas en la propuesta inicial”. De esta forma, “independientemente del porcentaje de reducción de jornada que se le aplique a cada persona ninguna cobrará menos de mil euros al mes sumando el sueldo por la jornada efectivamente trabajada, la prestación por desempleo y la mejora introducida”, precisan las mismas fuentes. Asimismo, añaden que “tampoco va a experimentar una reducción de ingresos líquidos respecto a su salario neto medio del último año, superior a los 100 euros al mes”.

La representación legal de los trabajadores aclara que ha firmado el ERTE con acuerdo “porque la empresa ha aceptado algunas premisas”. Entre ellas, la de garantizar la estabilidad y restitución individual en el empleo, es decir, que “ningún trabajador va ha ser despedido hasta la completa recuperación del derecho a prestación por desempleo”.

No obstante, el sindicado no refrenda el acuerdo y tampoco lo acepta por considerarlo “sesgado, discriminatorio, arbitrario y caprichoso en cuanto a los porcentajes de reducción que constituye un total sin sentido y arbitrariedad”.

Pese a ello, ha manifestado a la totalidad de la plantilla “su total respaldo, ayuda y apoyo”, y garantiza que seguirá formando parte de las comisiones de seguimiento del ERTE “para que se de fiel cumplimiento a lo pactado y la medida se lleve a cabo con total transparencia y dentro de la legalidad”. Por ello, advierte de que denunciará “cualquier incidente, irregularidad o incumplimiento”.

El concejal de Concesiones Administrativas, Lope Afonso, apunta que el grupo de gobierno “acoge con satisfacción el acuerdo alcanzado dado que para la correcta prestación del servicio es necesaria la paz social en la empresa”. Pero sobre todo, agradece el esfuerzo realizado por ambas partes y sobre todo, “el compromiso y la responsabilidad de los trabajadores”.