X
tribuna>

Alguna vez – Por Indra Kishinchand

   

Ya sé que es demasiado tarde, pero aléjate de mí. Corre hacia al lado opuesto de mis desequilibrios. Vive peligrosamente, como si fueras funambulista en el mar. Huye de todo lo que huela a olvido. Rechaza el abandono que suponía estar a mi lado y vuela hasta que te hundas.

Ya sé que es demasiado tarde, pero aléjate de mí. Ahuyenta con tu voz todos los espíritus del pasado. Haz de tu existencia un lugar mejor donde descansar del odio. Quiere desesperadamente. Pero no a mí.

Tal vez es un poco pronto para decirte esto, pero olvídate de mí. Me comprometí en dos medios días y me di cuenta de que mi prometida era la soledad hace ya muchas vidas. Sé aquella que se encuentra en y con los otros.

Ignoro si este es el momento adecuado para confesarte mis miedos, pero olvídate de mí. Libérate de ese olor a podrido que inunda tu mente. Aproxímate al abismo de tu yo y persigue cada aliento de verdad que encuentras en las mentiras.

Y, por favor, de una vez por todas, disfruta del invierno. Ahora ve y olvida”.

Eso dijo al partir.