La crisis económica ha sido la gran devastadora en perjudicar sectores prioritarios en la vida de la sociedad canaria. En lo que respecta a la cultura de los libros, tampoco se ha escapado de los tentáculos de esta crisis económica y de escalas de valores. Sin embargo, y pese a todo ello, los responsables de las editoriales y librerías de Canarias han seguido trabajando duros; aguantado el “chaparrón” de una crisis que ha dejado su huella. Muchos de los libreros se han visto obligados a echar la persiana abajo. Es decir, los libreros de toda la vida. Sin duda, en los últimos años los espacios para la cultura se han reducido y eso ha creado un vacío en la sociedad canaria. La televisión, que es el medio más masivo, poco ofrece y en ella apenas se mencionan los libros. Por si fuera poco, en la actualidad hay muchas personas que prefieren leer online y gratis; antes que pagar por un buen libro de papel. Sin embargo, aún quedan algunos libreros que se resisten abandonar la cultura del libro. Uno de ellos es Francisco Lemus; ubicado en la Ciudad de San Cristóbal de La Laguna. Francisco Lemus sigue aguantado la embestida de manera estoica; teniendo los mejores libros y firmas de todos los autores de muchos rincones del mundo. De la misma manera, Francisco Lemus sigue dando la oportunidad para que muchos autores de libros puedan presentar sus obras en sus importantes instalaciones, especialmente la pasada semana tuvo un gran éxito el libro titulado: La hija de la costurera; cuya autora es Concha Mendoza González. El citado evento cultural tuvo una gran aceptación por parte del numeroso público asistente. Ni que decir tiene, que el acto se desarrolló en un clima de afectividad, amistad y mucha sensibilidad, sobre todo cuando la presentadora y periodista, Cristina Álvarez Roque, comenzó abriendo su intervención rescatando las experiencias, sentimientos, lugares y recuerdos que la autora del citado libro vivió en otra época y en otros lugares. Del mismo modo, Cristina Álvarez le dio un toque de luz y vida a cada página de la obra: La hija de la costurera. Todos los ponentes estuvieron brillantes y acertados en cada uno de sus respectivos cometidos, siendo muy valorados y aplaudidos por el público asistente. De igual modo, el dramaturgo, Oscar Bacallado, destacó la soledad y el periqueen que le hizo erizar la piel a la protagonista, Concha Mendoza. También, la anécdota entre un vecino del mundo rural y el cura del pueblo. Como no podía ser menos, el editor (Ediciones Aguere e Idea), Ángel Morales, el cual defendió el libro La hija de la costurera y la sensibilidad, valentía que la mencionada autora ha tenido a la hora de escribir sus recuerdos en el paso del tiempo. Como en anteriores ocasiones, Francisco Lemus presentó: Bodegas Balcón de La Laguna, donde su propietario, Manuel Capote Pérez, estuvo emocionado por el desarrollo del evento cultural. Cerró el acto la verdadera protagonista de este encuentro cultural, Concha Mendoza González; agradeciendo gratitud a todos/as por estar una parte de su familia y amigos/as en un momento puntual muy importante de su vida. También, defendió la cultura como elemento importante para la vida de las personas. Acto seguido, y para darle más ritmo a una noche de embrujo, actuaron un dúo musical