Doménech: “Los poderes políticos han ninguneado a la universidad”

Foto: SERGIO MÉNDEZ

JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife

Satisfecho, a medias. El rector de la Universidad de La Laguna (ULL), Eduardo Doménech, se marcha de la institución académica “con la conciencia tranquila” y el amargo sabor que le han dejado los recortes presupuestarios de los últimos años, que según él le han impedido llevar a cabo algunos de los proyectos que estaban incluidos en su programa de gobierno.

Durante su discurso -el último oficial como rector- con motivo del Día Institucional por el 223 aniversario de la fundación de la ULL , Doménech se volvió a mostrar muy crítico con las administraciones, a las que acusó de “ningunear a la universidad”. “La falta de visión de nuestros representantes, rozando a veces la pura ceguera, se sale de toda lógica. Todos claman por la sociedad del conocimiento, pero sin apostar por ella, sin invertir en recursos que se considerarían básicos en cualquier sociedad progresista”, agregó Doménech, quien dejó claro que “la consecuencia más devastadora de todo ello se refleja, a ojos vista, en el mundo de la investigación, que ha quedado en este país prácticamente asolado, y en la marcha de nuestros alumnos a otros destinos donde sí hay empleo”.

El rector lagunero recordó además que “esta es la única institución que socializa, que permite y fomenta la igualdad de oportunidades, que, se venga de donde se venga, mide las capacidades de igual valor y que ofrece a los estudiantes, sean quienes sean, una herramienta única y valiosísima: el conocimiento”. En este sentido, Eduardo Doménech explicó que esta ha sido una de las grandes experiencias de su vida. “No solo por la responsabilidad de ostentar el honor y la condición de rector de esta universidad, sino también por la intensidad y el cúmulo de experiencias vividas”.

“Creo sinceramente que he acometido grandes proyectos, que he cambiado la cara y el fondo de esta universidad, si bien he de reconocer que otras iniciativas, no muchas, se quedaron en el tintero o, simplemente, no tuve capacidad para ejecutarlas”, agregó Doménech, quien insistió en que no accedió al cargo “para recibir condecoraciones ni parabienes; de hecho, me voy sin ellos, pero con la convicción de que muchas cosas han cambiado y de que he cumplido mis compromisos”, espetó.

Y es que, en su opinión, la Universidad de La Laguna “se ha modificado por fuera y por dentro, y esta transformación no sólo la constatan quienes formamos parte de ella, sino también las instituciones con las que colaboramos, los medios de comunicación que proyectan nuestra imagen y, en general, la ciudadanía canaria. Todos ellos nos devuelven, a modo de espejo, una ULL que se ha recreado a sí misma”.

“Hemos realizado un enorme esfuerzo de contención de nuestro gasto corriente y en nuestra inversión en infraestructuras, y lo seguimos haciendo. Pero es obvio que no podemos seguir así, que necesitamos financiación adecuada para seguir siendo competitivos, que ningún ranking internacional podrá recoger nuestra actividad si nuestros investigadores no cuentan con apoyo suficiente para sus proyectos”, concluyó Doménech.