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Pedro Medrano: “Canarias es un punto estratégico clave para la ONU”

   
Pedro Medrano, secretario General Adjunto de la ONU  y coordinador  de la respuesta  a la epidemia de cólera en Haití. / NACIONES UNIDAS

Pedro Medrano, secretario General Adjunto de la ONU y coordinador de la respuesta a la epidemia de cólera en Haití. / NACIONES UNIDAS

JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife

Licenciado en Ciencias Jurídicas y Sociales por la Universidad de Chile y experto en Derecho Europeo, el diplomático chileno Pedro Medrano Rojas ha desempeñado varios cargos de alto nivel en Naciones Unidas (ONU) relacionados con el ámbito humanitario, entre ellos, director interino del Programa Mundial de Alimentos. Desde agosto de 2013, Medrano es el coordinador principal de la ONU para la respuesta al cólera en Haití, nombrado por el propio secretario general, Ban Ki-moon, para hacer frente a la que se ha convertido ya en una de las epidemias más devastadoras de la historia reciente. Hace unos días estuvo de visita en España para sensibilizar y recabar apoyos. Por su papel geoestratégico, Medrano considera “fundamental” el papel que puede jugar Canarias a la hora de abordar emergencias como las que se viven en algunos países de África y América Latina. De todo ello habla en esta entrevista concedida al DIARIO.

-La ONU considera que la epidemia de cólera que padece Haití es una de las lacras más importantes de la historia reciente. ¿No es así?
“Sin duda. Hemos reducido el número de casos de cólera en relación a años anteriores, pero las cifras de nuevos afectados siguen siendo muy altas. El año pasado tuvimos 28.500 casos nuevos, y en lo que llevamos de año cerca de 5.000, lo que nos preocupa muchísimo. Por eso, necesitamos el apoyo de países como España, porque para la ONU constituye una emergencia sanitaria de primer orden, porque en ningún país del hemisferio occidental hay un número tan elevado de casos. En total, hay más de 730.000 afectados en Haití, una verdadera tragedia”.

-¿Cuál es el motivo de su visita?

“España está jugando un papel muy importante en materia de cooperación”

“El principal motivo es continuar recabando apoyos para seguir atendiendo a todos estos casos y asegurar que las inversiones que se están haciendo en agua y saneamientos por parte de España continúen, porque es el país que más ha contribuido a estos programas en Haití en las últimas décadas. Y Haití tiene la más baja cobertura de agua y saneamientos de todo el hemisferio occidental. Por este motivo, me he reunido con los responsables de la Agencia Española de Cooperación (Aecid) y también con gobiernos de varias comunidades autónomas y organismos no gubernamentales que han colaborado con la sociedad civil en Haití, cuyo apoyo ha sido de enorme importancia”.

-Da la sensación que los organismos internacionales se vuelcan de forma inmediata cuando hay una emergencia de este tipo, pero a largo plazo cuesta más mantener ese apoyo en los países más desfavorecidas. ¿No cree?
“La cooperación internacional tiene dos instrumentos para atender a los países más desfavorecidos. Uno es más inmediato, a través de la emergencia; y el otro es el trabajo a largo plazo, a través de la inversión en infraestructuras que permitan el desarrollo económico y social del país. Esta opción es, sin duda, mucho más lenta, aunque es igual de importante que el trabajo que se realiza a corto plazo. En el caso de Haití, hubo una contribución enorme después del terremoto, lo que permitió salvar muchas vidas, pero ahora estamos en una etapa en la que hay que atender aquellas áreas donde apenas hubo inversión en el pasado, lo que hace que Haití sea el país más pobre de Latinoamérica”.

-En el caso de España, ha habido un recorte muy importante de los recursos de la propia Agencia Española de Cooperación, lo que ha provocado que abandonen y supriman muchos proyectos…
“La situación económica de España es la que es, y además hay que entender que han aparecido muchas crisis humanitarias, como el ébola, los refugiados de Siria, los conflictos en África Occidental, etcétera. Aun así, España está jugando un papel muy importante en materia de cooperación, y nosotros lo que pretendemos es que siga estando en la agenda política y presupuestaria, especialmente en el caso de emergencias como las de Haití. En cualquier país del mundo, con 30.000 casos de cólera al año, sería una emergencia sanitaria de primer nivel, y si no los atendemos, pueden morir. Por eso, hemos puesto en marcha un programa urgente de vacunas, para evitar que los casos aumenten. La vacuna, que tiene un 86% de eficacia, no es la solución, pero ayuda a prevenir la aparición de más afectados. Y los planes de infraestructuras son claves para trabajar en esta materia”.

-Naciones Unidas cuenta con una base logística del Programa Mundial de Alimentos en Canarias. ¿Ha tenido contactos con el Gobierno regional de cara a nuevas relaciones en materia de cooperación y ayuda al desarrollo?
“Canarias es un punto estratégico clave; por eso, Naciones Unidas cuenta con un centro logístico, y ese es el mejor ejemplo del apoyo que presta la región sobre todo a los países de África Occidental. Pero Canarias tiene una importante vinculación con Latinoamérica, donde hay una gran comunidad canaria. Por eso, hemos planteado a las autoridades canarias la posibilidad de incluir, en la medida de lo posible, alguna contribución para Haití, que también tiene una posición estratégica que puede provocar que una epidemia como la del cólera se extienda por la región”.

-¿Tiene en sus planes la ONU aumentar sus infraestructuras logísticas y programas en las Islas?
“No le puedo contestar a esa pregunta, porque no depende de mí. Pero sí considero que la especial relación de Canarias con América Latina y su posición geoestratégica, es importante que se mantengan las relaciones fluidas que hay actualmente entre la ONU y las autoridades canarias”.


Desde la aparición del cólera en Haití, en octubre de 2010, el Ministerio haitiano de Salud Pública y Población (MSPP) ha registrado más de 730.000 casos sospechosos y cerca de 9.000 muertes relacionadas con el cólera. / NACIONES UNIDAS Desde la aparición del cólera en Haití, en octubre de 2010, el Ministerio haitiano de Salud Pública y Población (MSPP) ha registrado más de 730.000 casos sospechosos y cerca de 9.000 muertes relacionadas con el cólera. / NACIONES UNIDAS
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Desde la aparición del cólera en Haití, en octubre de 2010, el Ministerio haitiano de Salud Pública y Población (MSPP) ha registrado más de 730.000 casos sospechosos y cerca de 9.000 muertes relacionadas con el cólera. / NACIONES UNIDAS

La lacra silenciosa del cólera en Haití

Desde la aparición del cólera en Haití, en octubre de 2010, el Ministerio haitiano de Salud Pública y Población (MSPP) ha registrado más de 730.000 casos sospechosos y cerca de 9.000 muertes relacionadas con el cólera. Pese a los graves problemas financieros y de infraestructuras, los esfuerzos nacionales e internacionales han reducido drásticamente el número de casos de cólera en el país -desde el cénit de 350.000 casos en 2011, a 27.000 casos registrados hasta el 31 de diciembre de 2014. Sin embargo, la bacteria sigue haciendo estragos entre la población, principalmente debido a la falta de acceso a agua potable e instalaciones de saneamiento apropiadas. No en vano, en Haití solo el 77% de la población tiene acceso a agua limpia en áreas urbanas, una cifra que baja hasta el 48% en las áreas rurales.