DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz de Tenerife
Aprender cómo funciona un atrapanieblas, simular la elaboración de pintura con sangre de drago o descubrir un tipo de madera que no flota. Los más de 21.000 escolares que disfrutarán del aula móvil que ayer presentó la Fundación DISA se acercarán a la ciencia de una forma didáctica y cercana: dos monitores se encargarán de ir por 175 colegios explicando las riquezas que esconde el Archipiélago. Es el primer proyecto regional DISA y el más ambicioso. Lo harán dentro de una guagua convertida en aula que recorrerá los centros, pero que por las tardes también estará disponible, en plazas y lugares públicos, para quienes quieran acercarse y conocer mejor cómo es el suelo que pisan, el mar donde se bañan, el aire que respiran o, incluso, el cielo.
El proyecto educativo DISALab, no obstante, no es solo una guagua: es un laboratorio itinerante de ideas, conocimiento y divulgación. Lleva ya un mes en circulación y en este tiempo más de 8.000 personas han disfrutado de la experiencia. En él los estudiantes pueden realizar experimentos, pero también disfrutar de vídeos y de una exposición interactiva sobre las riquezas naturales del Archipiélago. Para esta primera iniciativa dentro de DISALab, que se ha denominado Canarias: laboratorio de la biodiversidad, la Fundación DISA ha seleccionado un ejemplo de esta singularidad en cada una de las siete islas. Así, los visitantes podrán conocer más sobre el drago de Gran Canaria, el lagarto gigante de El Hierro, las dunas móviles de Fuerteventura, el ecosistema de alta montaña de El Teide, la resistencia al fuego del pino canario en La Palma, el cangrejo ciego de Lanzarote y la laurisilva de La Gomera. La documentación ha corrido a cargo de expertos en cada una de estas siete temáticas, algo que ha permitido dotar a los contenidos de una mayor entidad. Entre ellos han estado Wolfredo Wildpret, profesor emérito de la Universidad de La Laguna y Premio Canarias de Investigación, y Rafael Rebolo, director del Instituto Astrofísico de Canarias (IAC). El objetivo es despertar las vocaciones científicas entre los más pequeños y cambiar otro ecosistema: el económico.
La presentación contó con la presencia del presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso; el alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, y el consejero de Medio Ambiente Miguel Díaz-Llanos, además de la del presidente de la Fundación DISA, Raimundo Baroja, y su directora, Raquel Montes.