DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz de Tenerife
El actor español Maxi Iglesias, uno de los más prometedores talentos del cine español que desde 2010 es embajador de SEAT, estará en Espíritu de Montjuïc prácticamente todo el fin de semana. El viernes 17 participará en el acto de prensa de SEAT junto a Alejandro Mesonero-Romanos, responsable de Diseño de la marca; el sábado 18 formará parte del jurado del Concurso de Elegancia; y el domingo 19 participará en la Targa Catalunya junto a Fernando Salvador, director de Comunicación, al volante de un SEAT 124 Sport 1600.
Gran aficionado y “enamorado de los coches”, según se confiesa, Maxi Iglesias, como embajador de SEAT se siente identificado con el producto de la marca y en especial de los deportivos, elección que él mismo explica por ser un amante del diseño deportivo, la línea innovadora y el acabado rompedor de estos modelos de la marca, aspectos que encajan tanto con su carácter como con su propio estilo personal. Para Maxi Iglesias, esta época del año coincide con uno de los momentos profesionales más intensos de su carrera, con nuevos proyectos en cine y televisión.
Nacido en Madrid y con tan sólo 24 años, Maxi es uno de los actores, modelos y personajes habituales a la televisión más conocidos y con más éxito en nuestro país. Maxi Iglesias adora todo lo que tenga ruedas, sean motos, bicicletas y hasta patinetes, pero lo que realmente le apasiona son los coches, por ese motivo inició en 2010 una fructífera colaboración con SEAT.
Altaya Limited Edition con un mito: Montesa Impala 175 Sport a escala 1/5
La Impala en miniatura estará presente en esta edición de Espíritu de Montjuïc, ya que Altaya tendrá un amplio stand donde todos los aficionados podrán examinarla de cerca, a la vez que disfrutar de una interesante muestra denominada “Impalas de Excepción”, compuesta por media docena de ejemplares especialmente significativos dentro de la historia del modelo. La estrella de este grupo es, sin lugar a dudas, la Impala “Sevilla”, así denominada por su matrícula. Se trata de la moto personal de Leopoldo Milà, que éste utilizó de base para desarrollar la Impala 2 y luego seguir evolucionándola. Es una pieza poco vista que merece nuestra atención.