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Aunque la mona se vista – Por Ramiro Cuende Tascón

O se travista de seda, mona se queda. Estos días que vivimos depositaran a España en 2016 de una forma diferente, caso de ser posible, visto lo visto, van a estar cargados de travestismo político. Todas y todos se van a transformar disfrazados de drag queens para parecer centristas. Parece ser que en el centro es donde está el pescado, la baja a la que hay que ir a pescar los votos. Tan es así, que todos sean de arriba, de abajo, progres o pacatos, izquierdosos o derechosos, al margen de los excluidos ultras de todos los extremos, el resto quiere hacerse pasar por cándidos centristas, liberales de bien y de la política en la que caben todos.

Vamos a disfrutar de un bufete centrista con toda suerte de opciones menús con sus tres platos cada uno a precios de sueño: 8, 10, 13… euros con tres platos a elegir. De primero: ensalada de despropósitos -la Espe, no quiero mendigos durmiendo en la calle, afean-, gazpacho mangante -especialidad del alcalde de Játiva, no se marea contando billetes a bordo-, o champiñones emergentes en su jugo -los traemos de la finca de Tania Sánchez en su pueblo-. De segundo, igualmente sorpresas a escoger: filete de ideas con guarnición -Gabilondo el quinto hijo del carnicero del Bretxa, pide respeto-, besugo de espaldas -un plato al margen de la realidad, receta de Mariano el Celta-, y arroz con mentiras y tomaduras de pelo -es difícil de preparar, es una especialidad de Pablo con su amigo, el del exmonedero, que siendo rojos a base de colorantes salen amarillos-. De postre el de la casa: urnas de crema con chocolate caliente. Parecen desabridos, no lo son, esconden un futuro de sabores entre agridulces, salados, picantones, incluso sin sabor, estos son los insípidos a los que las urnas eliminan de la carta.

Con el café un surtido de estupideces. En Canarias no ha habido nadie que pase hambre, para aliviarlo estaba yo el socialista, José Miguel Pérez.

Para no llevarnos a engaño, la piel de toro de la política española es como sigue a la vista de lo escuchado. De derecha a izquierda la foto es más menos así; a la derecha del todo se sienta el ala más dura del pepé, la faes que terminará siendo un partido, mirando de frente a su izquierda el pepé. Al lado se sienta ciudadanos que va en el centro junto al pesoe que comienza el lado de lado de izquierda del retrato político español. Luego viene iu, que lo está pasando mal tras el desparrame de los de podemos, que son los que recogen todas las tendencias e ideologías en un potaje al gusto de cada uno por la gracia de…

Alguien me va a tener que excitar el celo, como le escuché el otro día a un amigo.