1. Me siento orgulloso de Felipe González. El político español se ha cargado el régimen de Maduro. Ha ido a Caracas, a colaborar en la defensa de Leopoldo López y de Antonio Ledezma, ha dado una lección de valentía y de democracia. Hay que ver cómo estos garrulos chavistas se han cargado la labor de los grandes líderes venezolanos. Y cómo han perturbado a su pueblo, hasta el punto de que el momento económico de Venezuela, siendo uno de los países con más recursos naturales del mundo, es atroz, el peor de América Latina. Maduro es tan bruto y tan cobarde que ni siquiera ha querido viajar hasta el Vaticano para que el papa no le obligara a soltar a los presos políticos. Maduro camina a dos patas de milagro, porque su tendencia sería andar a cuatro y rebuznar cada diez pasos. Es lo más bruto que yo he visto en mi vida.
2. Si algo tuvo de bueno el régimen de Chávez, sobre todo en sus primeros tiempos, éstos se lo han cargado. Son unos dictadorzuelos de aldea, envueltos en la corrupción más espantosa y en unos ideales absurdos que se refieren más a sus bolsillos que a los intereses de un pueblo oprimido, sin cabeza, sin futuro y carente de moral. Se han cargado Venezuela, han arrasado el país en unos pocos años. Cuando los derriben, ¿dónde irán? ¿A refugiarse en los gayumbos de los Castro? ¿Qué país los va a acoger?
3. El régimen chavista tiene los días contados. Está en su tramo final. No se puede gobernar con unos líderes semianalfabetos, que están ahí a base de comprarlo todo, incluso a las Fuerzas Armadas, que han deshumanizado el país y lo han partido en dos, intentando además exportar su espíritu, a través de Podemos, a una España idiotizada por la crisis económica y con unos habitantes en ocasiones más burros que Maduro y los chavistas irredentos. Tomen nota, a ver lo que hacen en las generales de noviembre, si siguen votando a estos majaderos que harán que un día nos tengamos que limpiar el culo con una piedra. Como pasa allá.
achaves@radioranilla.com