economía

Los perdedores son los mismos de siempre

La crisis ha excluido más a los que ya estaban excluidos. | FRAN PALLERO
La crisis ha excluido más a los que ya estaban excluidos. | FRAN PALLERO

La crisis tiene perdedores y son los mismos de siempre. La situación de las personas con ocupaciones peor retribuidas, las mujeres y los extranjeros era complicada antes de la crisis, pero ahora es peor. Los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) demuestran que en Canarias la desigualdad ha crecido de todas las formas posibles: la diferencia de sueldos ha aumentado en favor de quienes cobran más, los hombres han mejorado sus ingresos frente a ellas y los inmigrantes han tenido mucho más complicado sobrevivir que los nacionales.

La encuesta anual de la estructura salarial del INE demuestra que aunque la crisis ha afectado de manera generalizada, su alcance no ha sido tan devastador entre todas las clases sociales. En 2008 una mujer española que vivía en las Islas cobraba de media 17.616 euros al año, mientras que una extranjera no llegaba a los 12.930 euros. En 2013, período que analiza el organismo, las españolas habían conseguido sumar casi 400 euros más a sus ingresos anuales, pero las extranjeras habían perdido alrededor de 300. El origen, por tanto, seguía teniendo un impacto inexplicable e injusto en la vida de las personas.

Esta diferencia de retribuciones no es la excepción: también queda en evidencia si solo se pondera el factor de género. Es decir, si se pone en una balanza a varones y mujeres, ellos salen mejor parados. Ganan más si se tiene en cuenta el salario medio -ellos reciben 20.678 euros y ellas 17.419 euros-, pero, además, la diferencia crece exponencialmente si se observa lo que perciben quienes tienen trabajos más cualificados o de mayor responsabilidad. Entonces los sueldos altos de ellos son bastante más elevados que los de ellas. Este reconocimiento económico en favor de los hombres ha ido en aumento en los últimos seis años. El único dato positivo al que los optimistas intentan aferrarse -la diferencia entre salarios medios de Canarias es la más baja de España- es un espejismo: ese liderazgo se debe a la precariedad generalizada de los sueldos en las Islas. Si lo normal es recibir menos, la distancia entre unos y otros se reduce.

[sws_pullquote_left]Las personas con contrato indefinido reciben más que las que están temporalmente[/sws_pullquote_left]

El estudio también pone de relieve otra forma más de desigualdad. Sin tener en cuenta el género o el origen, los salarios medios y altos que se recibieron en Canarias crecieron; en cambio, los bajos -sobre los 12.000 euros anuales- cayeron. Por ejemplo, una persona que en 2008 contaba solo con 8.591 euros, en 2013 había tenido que ajustarse más el cinturón y hacer malabares con casi dos mil euros menos. En cambio, quien percibía alrededor de 32.000 euros hace siete años, mejoró y consiguió hasta 35.000 euros para gastar. Estos datos adquieren más gravedad si se tiene en cuenta que figuran muchos más trabajadores en los valores bajos que en los sueldos más elevados; es decir, el grueso de la plantilla canaria está por debajo de la media. La crisis -lo dicen los números- ha hecho estragos entre los más vulnerables.

A la cola en España
El escenario nacional tampoco deja en buen lugar a esta comunidad autónoma. La ganancia media anual por trabajador fue de 22.697 euros en toda España, el 0,1% menos que en 2012.

En el Archipiélago, en cambio, fue de 19.167 euros, es decir, 3.000 euros menos que en el resto del país. Las Islas, junto con Extremadura (19.129 euros) y Galicia (19.824) mantuvieron el salario más bajo. En cambio, en País Vasco (29.915 euros), Comunidad de Madrid (26.215 euros) y Cataluña (24.2539) ocurrió lo contrario. Así y todo, en Canarias el sueldo medio subió, pero lo hizo a costa de que se enriquecieran las clases más altas, ya que las más bajas perdieron poder adquisitivo.

[sws_pullquote_right]Desde 2008 los sueldos más altos han crecido y los más bajos se han reducido[/sws_pullquote_right]

Temporalidad y precariedad
No es lo mismo estar fijo que tener un contrato temporal. Por ello, los expertos que han elaborado la encuesta han tenido en cuenta dos tipos de contratos, los indefinidos y los de duración determinada. Para poder establecer comparaciones entre las ganancias, se ha ajustado el salario de aquellos trabajadores que no permanecieron todo el año en el centro de trabajo. Se les ha asignado un salario anual equivalente al que hubieran recibido de haber estado trabajando durante todo el año en las mismas condiciones.

Una vez hecho este arreglo, los resultados demuestran los beneficios de tener un contrato indefinido. En todo el territorio español, los temporales recibieron el 36,6% menos que los indefinidos.
Por sexo, los hombres con contrato indefinido recibieron un salario el 22,3% más alto que la media y los de duración determinada el 28,4% más bajo. En las mujeres, el salario fue inferior al medio, independientemente del tipo de contrato (del 9,1% para los contratos indefinidos y del 35,8% para los de duración determinada).

Salarios por edad
Cumplir años tiene premio. Existe una relación positiva entre la edad de los trabajadores y el nivel salarial. Los empleados con más edad, al acumular normalmente más antigüedad y experiencia, cobraron más.

En el Archipiélago, si se tiene en cuenta solo la edad, quienes más cobraron en 2013 fueron los varones de entre 45 y 54 años. Este sí es, probablemente, el único dato positivo.

En términos globales la estadística demuestra que la desigualdad no ha dejado de crecer desde que comenzó la crisis. Las personas con escasa cualificación, quienes tenían los peores trabajos, las mujeres y los extranjeros han padecido más el desempleo, pero también la precariedad laboral. Este escenario explica el crecimiento de la economía sumergida en las Islas.