María José Pérez lidera, dentro y fuera del campo, a un grupo de jugadoras que acaban de alcanzar el cénit de sus carreras deportivas al conquistar una plaza en la élite del balompié femenino español. Esta tinerfeña de 31 años, que ya conoce las mieles de la Primera División y la internacionalidad con España, descansa estos días con la mente puesta en un nuevo desafío: asentar en la máxima categoría del fútbol femenino español al McDonald’s Granadilla Tenerife.

-¿Ya han asimilado, usted y sus compañeras, lo que han conseguido?

“A título personal estoy muy contenta, porque llevo intentando este ascenso con diferentes equipos de aquí; he tenido la suerte de estar con jugadoras espectaculares aquí, también en Las Palmas. Por eso estoy muy feliz de lograr este sueño para todos”.

-Usted, que ya sabe lo que es jugar en Primera, supongo que nada comparable ahora con hacerlo con un equipo de su tierra…

“Está claro que no. Será un lujo y hacerlo en tu tierra, donde van a venir grandes equipos a jugar. Te pueden ver la familia y amigos, por lo que es increíble. Es un gran orgullo disputar la Primera División con un equipo canario”.

-¿Con el paso de los años había perdido la esperanza de ascender con un equipo canario?

“Es verdad que nos ha costado mucho y vas perdiendo la esperanza cuando te pasan casos como los del año pasado, de quedarnos a las puertas por un gol y fuera de casa, que ya son muchos años así…será una casualidad pero siempre toca de esa manera, pero al final te quedas con que es muy satisfactorio el haber conseguido después de tantos años este deseado ascenso”.

-¿Qué recuerdo guarda de su paso por la Primera División hace más de una década?

“Son recuerdos muy bonitos. Me hice como persona allí y recuerdo lo mucho que me costó los primeros meses, pero valió para ver crecer a María José, para aprender de grandes jugadoras que tenía a mi lado y de una experiencia que es inolvidable. Por otro lado, aquella experiencia me dio la posibilidad de llegar a la Selección absoluta, ser 15 veces internacional y competir unos cuantos años al máximo nivel. Todo eso lleva a convertir en realidad el sueño que siempre deseé. Ahora lo he conseguido con un equipo de aquí. También pensé que nunca llegaría a ver a España en un Mundial y mira…No lo he jugado pero lo he vivido como ellas; las he animado desde aquí”.

-¿Sigue soñando con volver a la selección o lo ve como algo ya muy complicado?

“Sinceramente lo veo como algo muy complicado. Tengo 31 años y hay chicas que son muy buenas y vienen pisando fuerte. Lo veo un poco lejos para mi, pero voy a seguir trabajando con ilusión. Ahora me espera un año muy bonito con mis compañeras tras un año duro. Ahora solo me quedo con que este es otro sueño cumplido y tenía ganas de que llegara ese día porque echaba de menos esa categoría”.

-¿Cómo es la Primera División y qué le espera al Granadilla en esta categoría?

“Nos espera sufrir, pero sobre todo tenemos que mantener la calma cada semana; ser conscientes de que para ganar un partido tendremos que pelear muchísimo. También tenemos que jugar con el factor extra que supondrá la motivación que tenderemos nosotras. También tenemos que mentalizarnos de que lo que venimos haciendo estos años de ganarlo todo va a cambiar. Lo que no debemos cambiar es la mentalidad de salir a ganar a cada rival sea quién sea. Nos costará un poco cambiar el chip pero a este equipo le gusta mucho competir, como quedó demostrado en los play-off. Si seguimos todas juntas, creceremos en muchos aspectos”.

– ¿El traslado del equipo a jugar a Santa Cruz será beneficioso?

“Desde luego que sí, sin olvidar que hemos estado muy bien en El Médano, meter más gente allí es más complicado. En Santa Cruz la gente se puede acercar mejor; venir desde el Norte o desde el Sur será más fácil al estar céntrico el lugar para jugar; y también porque pienso que siendo de Primera tenemos que aspirar a más público, en lugar de que vengan 2.000 personas haya muchas más”

-¿Cree que este ascenso servirá para que el fútbol femenino en Tenerife de mucho de que hablar y viva esa época dorada que hace mucho que se está buscando?

“Noto como la gente se está volcando con nosotras. Ahora me paran por la calle, saben quién soy y me felicitan y eso no tiene precio. Creo que la gente de Tenerife va a apoyarnos como lo que somos, deportistas de alto nivel y ahora, sin desmerecer a nadie, somos el equipo tinerfeño más grande y que está en una categoría superior como es la Primera División” .

-A título personal, ¿cómo lleva el hecho de ser la jugadora más carismática y reconocida; la líder de este equipo?

“Me considero una más, una chica que trabaja día a día. Sin ir más lejos, hace un año me lesioné y con mi esfuerzo y sacrificio, junto al apoyo de mis compañeras y de mi familia, me pude recuperar e intenté ayudar. Con eso te quiero decir que yo no soy la clave de este equipo. Somos once que jugamos, más las del banquillo, más la gente que se queda por fuera. Esto es un equipo, un bloque, y yo sola no podría hacer nada”

-Hace unos meses, cuando se produjo el relevo en el banquillo, ¿qué le dio Toni Ayala al grupo?

“Nos dio mucha confianza y luego, en lo futbolístico, ritmo de juego. También nos ayudó a creernos que podemos hacer muchas cosas. Esa motivación que íbamos perdiendo, él cogió y nos la subió. Hay que agradecer todo el trabajo que ha hecho, que es magnífico; no solo Toni, sino todo el cuerpo técnico. Los fisios, los que han visto videos para informarse de los rivales…todos han aportado. No me quiero olvidar de Jose, que es el que nos lleva el material, que siempre está ahí para todo y no hay palabras para agradecérselo”.

-¿Se llegar a vivir del fútbol en la Primera División femenina?

“En dos años nos pusimos en Primera; quién sabe si en otros dos nos podremos dedicar de manera exclusiva al fútbol”.