No sé si es el cambio de interlocutores, la proximidad de las elecciones generales o ambas cosas, pero lo cierto es que Canarias empieza a pintar algo en Madrid. La ministra de Fomento, Ana Pastor, aprueba un sistema antinieblas para el aeropuerto de Los Rodeos, algo que para los que vivimos en la Isla sabemos que es absolutamente necesario. La ministra de Empleo, Fátima Báñez, otorga al Archipiélago casi 4,5 millones de euros con cargo al Programa de Activación para el Empleo. Y el canario José Manuel Soria, que en la legislatura pasada no pasó por Presidencia del Gobierno, ahora se reúne con Fernando Clavijo en plena armonía. Que los protagonistas canarios hayan cambiado, influye. La presencia de Paulino Rivero y Francisca Luengo en el Ejecutivo anterior minó las relaciones con Madrid. La enemistad manifiesta entre ambos interlocutores y Soria ralentizó muchos proyectos. Desaparecido Rivero (políticamente hablando) todo marcha como la seda. Pero no nos equivoquemos. La proximidad de las elecciones generales hace necesario un cambio de imagen en el PP, sobre todo con Canarias, donde ha estado ausente. Un cambio que, además, debe ser radical, ya que si algo está claro es que estas elecciones generales no serán como las pasadas. La irrupción de nuevos partidos en el panorama político y, sobre todo, el descontento del electorado, incluido el votante del Partido Popular, no tanto con la gestión de la crisis, como con la manera en la que se han afrontado los casos de corrupción, obliga a los conservadores a un cambio de estrategia rápido y efectivo. Otra cosa es que desde el Archipiélago el nuevo Gobierno mandatado por Fernando Clavijo y Patricia Hernández aproveche este cambio para su propio beneficio, o mejor dicho, para el beneficio de los canarios. El diálogo al que tanto apeló Clavijo durante la campaña electoral parece empezar a funcionar. Otros pueden pensar, los más mal pensados, que las buenas relaciones con el Estado ahora tienen mucho que ver con la simpatías de Clavijo con el PP, mucho más que con el PSOE, y que se podría estar allanando el terreno para un posible pacto a nivel regional en función de los datos nacionales. No obstante, aunque muchos de los pactos a nivel insular y municipal están aguantados con pinzas, el acuerdo de gobierno regional tiene cimientos mucho más sólidos. Ahora, lo importante es que el Ejecutivo se ponga a trabajar y dado que tiene los resultados macroeconómicos de su lado, comience a solucionar los problemas de los canarios. Porque esperar a ver lo que ocurre en noviembre con las elecciones sería un gran error. Un grave error.
Ahora sí importa Canarias publicado por María Fresno →