Candelaria ha puesto en práctica una campaña de esterilización de gatos callejeros y una red de casetas alimentadoras para estos animales por distintos lugares del municipio, con el objetivo de evitar que sea alimentados de manera arbitraria por los vecinos, algo que está penalizado por la nueva ordenanza municipal sobre animales.
“Conscientes de la necesidad de controlar las colonias de gatos existentes en la localidad, el Ayuntamiento ha realizado un exhaustivo trabajo a través del proyecto de Gestión Responsable de Colonias de Gatos de Candelaria”, señala la alcaldesa, María Concepción Brito.
En está línea, la concejala de Sanidad, Vaitiare Rodríguez, adelanta que la próxima semana dará comienzo una campaña de esterilización de gatos callejeros, centrándose en las colonias censadas por el Ayuntamiento. Antes de ponerse en práctica este proyecto, en una primera fase ya se habían capturado más de 50 gatos y soltado en las mismas colonias.
Rodríguez recuerda que la Concejalía también está trabajando dentro del proyecto en la distribución de pequeñas casetas alimentadoras que han sido especialmente diseñadas para el suministro de alimento seco y agua para los animales, evitando la alimentación directa en la calle o en los parques y con ello situaciones de insalubridad. Hasta el momento se han colocado seis alimentadores en Punta Larga, Las Caletillas (2), La Hornilla, casco de Candelaria y Santa Ana, y en las próximas semanas se emplazarán en nuevas zonas donde se han detectado y censado colonias de gatos.
Un proyecto municipal en el que está siendo fundamental la colaboración de los voluntarios, a quienes la concejala responsable de Sanidad les agradece su implicación.
Por último, desde el Consistorio se invita a los vecinos a informar de posibles incidencias con las colonias, para ello pueden llamar a la Concejalía de Sanidad. Los cambios realizados en la nueva ordenanza municipal sobre animales de compañía aprobada recientemente en sesión plenaria tienen el objeto de favorecer la convivencia entre propietarios de animales y otros vecinos, así como conseguir mejoras para los propios animales. En este sentido, por ejemplo, en la ordenanza se prohíbe la estancia en playas y piscinas de uso público, mientras que en la modificación actual se permite la estancia en aquellas playas autorizadas expresamente por el Ayuntamiento, lo que permitirá la creación de playas para uso y disfrute de animales y dueños, estando previsto que la pequeña cala de Samarines, entre la plaza de la Basílica y Playa la Viuda, pueda ser uno de los lugares acotados para las mascotas.