Agentes de la Policía Nacional, adscritos a la Comisaría de La Laguna (Tenerife), han detenido a una mujer que presuntamente abandonó a su hijo para cometer un robo.
En concreto, los agentes arrestaron a la mujer por un delito de hurto y por abandono de menores, al dejar a su hijo supuestamente encerrado en casa “diciéndole que iba a por dinero pero realmente fue a un comercio a robar”.
Asimismo, y según informó la Policía Nacional en nota de prensa, no comunicó a los agentes que su hijo estaba “solo, encerrado y sin comida” en un domicilio de la Avenida de la Trinidad en La Laguna, en el centro urbano.
Estos hechos se remontan a finales del mes de junio cuando la ahora detenida dijo a su hijo, un menor de 7 años de edad, que esperara en casa mientras ella iba al banco a sacar dinero. Sin embargo, presuntamente se dirigió a un conocido comercio del municipio donde intentó sustraer diverso material informático pero fue arrestada y trasladada a la Comisaría de la Policía Nacional en La Laguna.
Al respecto, los agentes señalan que una vez detenida, a pesar de haber estado en todo momento custodiada por los agentes y haber tenido diversas oportunidades de comunicar la situación de su hijo, “prefirió callar, consciente del hecho de que su hijo se encontraba solo”.
Ante esta situación, el menor permaneció encerrado en su domicilio, con la puerta cerrada con llave y sin alimento “durante horas”, además de estar en una casa que “no cumplía las mínimas condiciones de higiene, rodeado de bolsas de basura y restos de comida en descomposición con la única” compañía de una estufa encendida que se encontraba cerca de su cama.
Más de 12 horas sin comer
El menor al ver que a la mañana del día siguiente su madre no volvía a por él, empezó a pedir auxilio entre sollozos en la puerta del inmueble lo que alertó a los vecinos. La llamada a la Policía Nacional hizo que se personarán allí dos radiopatrullas del Grupo de Atención al Ciudadano que pudieron localizaron el inmueble en el que se encontraba el menor y acceder al mismo por una ventana para liberarla al niño, que llevaba más de doce horas encerrado y sin comer.
Posteriormente, tras ser rescatado, los agentes le consiguieron alimento en un supermercado, que costearon ellos mismos, y se le solicitó asistencia sanitaria, al tiempo que se le entretenía hasta localizar un familiar que se pudiera hacer cargo del mismo.
Los agentes localizaron al padre del menor, quien se mostró “enormemente afectado” por lo sucedido, haciéndose seguidamente cargo de su hijo.
Finalmente, tras varios días, el menor hizo una llamada al 091 informando a los agentes que su madre, tras regresar del Juzgado, lo había golpeado, por lo que se dio cuenta a la Fiscalía de Menores. Por ello, una vez tramitados los atestados policiales, la mujer fue puesta a disposición judicial, quedando en libertad, mientras que los hechos relacionados con el menor se han puesto en conocimiento de la Fiscalía de Menores.