Sebastian Vettel (Ferrari) venció en el Gran Premio de Hungría en la mejor carrera del mundial esta temporada. El alemán pudo dedicar su victoria al recientemente fallecido Jules Bianchi tras dominar de manera incontestable una prueba apasionante con numerosos incidentes y adelantamientos donde Fernando Alonso tuvo una destacada actuación finalizando quinto.
El primer golpe de efecto llegó en la salida, donde los monoplazas de Ferrari superaron a los Mercedes dando la sorpresa. Vettel se colocó en primer lugar, mientras Kimi Raikkonen superaba a Nico Rosberg propiciando el primer error de Lewis Hamilton. El piloto inglés se precipitó tratando de recuperar la tercera posición a su compañero y su maniobra excesivamente ambiciosa le llevó a salirse de pista antes de la chicane tras haber errado en la salida.
Desde el comienzo pudo verse cómo los Ferrari tenían mucho más ritmo con el neumático blando escapándose en cabeza y haciendo prever que sólo la mecánica podría interponerse en el camino del doblete para la escudería italiana. Sin embargo, aún quedaba mucha tela que cortar en Hungaroring. En esas primeras vueltas, Roberto Merhi tuvo que pasar por el pitlane a cambiar el reposacabezas suelto en el cockpit de su Manor. Los otros españoles en pista daban un gran espectáculo luchando entre ellos, pero una lenta parada de los mecánicos de Toro Rosso provocaba que Carlos Sainz fuera adelantado por Fernando Alonso.
En cabeza, los Ferrari seguían marcando el ritmo, mientras Hamilton acumulaba un fallo tras otro al tocarse con el Williams de Felipe Massa después de adelantarle a final de recta para luego salirse de pista. La carrera proseguía repleta de incidentes, como el toque entre Sergio Pérez (Force India) y Pastor Maldonado (Lotus), que acumuló tres sanciones a lo largo de la prueba. Entonces llegó la primera ronda de pitstops, donde Alonso tuvo que parar antes de lo previsto debido a un pinchazo. Una avería en el MGU-K de Kimi Raikkonen causaba la pérdida de 160 caballos en el motor de su Ferrari, dejándole indefenso frente a sus rivales justo antes del accidente que determinaría la carrera. Al perder el alerón el Force India de Nico Hülkenberg, reciente ganador de las 24 horas de Le Mans, colisionó contra las protecciones y dejó el final de recta principal lleno de restos de fibra, lo que obligó al coche de seguridad a salir a pista durante cinco vueltas en las cuales muchos aprovecharon para cambiar neumáticos antes de una de las resalidas más espectaculares de los últimos años.
El asturiano Fernando Alonso montó neumáticos blandos, lo cual sería determinante en su remontada final. Al reemprender la marcha, Rosberg adelantó a Raikkonen por la segunda posición y Hamilton chocó con Daniel Ricciardo, rompiéndose el alerón delantero del Mercedes y provocando el toque de Max Verstappen (Toro Rosso) y Valtteri Bottas (Williams), el cual se saldó con un pinchazo para el finlandés y desperfectos aerodinámicos para el holandés.
Las sanciones se sucedían en cascada, pues tanto Maldonado como Verstappen rebasaban el exceso de velocidad con coche de seguridad, mientras Hamilton recibía un drive-through por su choque con el Red Bull. En el box, Raikkonen detenía su Ferrari apagando el motor y reseteando la centralita para tratar de solventar la avería, pero tuvo que retirarse más tarde. Lo mismo le sucedería al madrileño Carlos Sainz, quien tras adelantar a Fernando Alonso en lucha por la sexta plaza tuvo que abandonar a falta de sólo ocho vueltas con una nueva avería en el Toro Rosso (la tercera consecutiva).
Los Red Bull apuntaban al podio pese a la sanción de 10 segundos a Kvyat y la investigación a Ricciardo por abalanzarse sobre Rosberg en un intento de adelantamiento que pinchó el neumático trasero del alemán, arruinando su carrera, mientras Hamilton remontaba como un poseso adelantando a ambos Sauber y al McLaren de Button.
[sws_grey_box box_size=”100″]El Nano, tentado por otros retos
El piloto asturiano ha mostrado su desilusión por su situación en el mundial de Fórmula 1. A pesar de su compromiso con el proyecto de McLaren-Honda, Alonso cree que la Fórmula 1 ya no es tan atractiva para él como antes teniendo en cuenta las limitaciones impuestas por la FIA para el desarrollo de los monoplazas. El hecho de ser sólo dos o tres segundos más rápidos que un GP2, junto al atractivo de otras categorías como el mundial de resistencia, hacen que Fernando se plantee cambiar de aires y correr en otros campeonatos.
Alonso declaró en Hungaroring que “antes si el monoplaza no era competitivo en el inicio del campeonato podías darle la vuelta a la situación y acabar con un coche bastante rápido. Ahora, sin embargo, tenemos las manos atadas durante el resto de la temporada con demasiadas limitaciones”.
Es probable que Alonso compita en las 24 horas de Le Mans el año que viene si McLaren y el calendario se lo permiten, pero aún le quedan dos años más de contrato con la escudería de Woking que el asturiano piensa cumplir a rajatabla.[/sws_grey_box]
[sws_grey_box box_size=”100″]Alonso: “Al final no sabía si era quinto o sexto”
Fernando Alonso aseguró tras finalizar en Hungría que “fue una pena que acabase la carrera porque en cada vuelta me decían que a alguien le pasaba algo y ganábamos posiciones. Ha sido una carrera complicada porque hemos tenido un pinchazo, y una visera del casco se metió en la entrada de frenos, pero al final salió todo bien. Cuando Verstappen me preguntó en qué posición había quedado, me puso en duda, al final no sabía si era quinto o sexto”. Cuestionado por la temporada, señaló que “siempre me divierto, pero seguramente nos gustaría ser más competitivos y pelear por cosas importantes. No ha sido un año bueno, pero estoy aprendiendo a trabajar con la cultura japonesa. El coche ha mejorado en cada carrera, sobre todo aerodinámicamente”. Carlos Sainz afirmó enfadado: “Imagínate el cabreo que tengo, el equipo tiene que darme explicaciones de por qué no me han parado. Una carrera más en la que estábamos en los puntos y que no terminamos”.[/sws_grey_box]