Como concejal de Accesibilidad tiene por delante convertir a Santa Cruz en una ciudad accesible, tanto que se marca como objetivo que la capital forme parte en 2019 de la red europea de ciudades accesibles. Carlos Correa (PP) lleva 20 años en silla de ruedas, lo que le hace un perfecto conocedor de las barreras que una ciudad como Santa Cruz presenta pero, como el mismo reconoce, “eso no hace que conozca todo y por eso queremos que también otro tipo de discapacidades aporten sus ideas a la ordenanza que está en marcha”. Habla Correa de la norma que regula la accesibilidad que, afirma, “tiene que estar aprobada antes de final de año”.

-¿Qué significa tener una ciudad accesible?

“Tenemos un problema grave en Santa Cruz. Cuando hablamos de accesibilidad muchas personas piensan en rebajes de acera y es mucho más que eso. Hablamos de accesibilidad universal que va desde uno obra en una calle hasta facilitar el acceso a la información”.

-En base a esa definición, ¿cuáles son los retos?

“El Plan de Accesibilidad es uno de ellos. Se le encargó a Simpromi que redactara este plan abarcando todos los ámbitos de la accesibilidad. Ya tenemos un informe preliminar, y a finales de octubre ya deben tener el documento completado. Ese texto nos va a dar el camino por dónde tenemos que ir y la meta es que en el 2019 optemos a que la ciudad sea una ciudad europea accesible. Es una meta muy ambiciosa, pero si no nos marcamos objetivos de este tipo, nos moriremos en la mediocridad”.

-Si tuviera que empezar por algo, ¿por dónde lo haría, por la concienciación?

“Es una de las primeras cosas que tenemos que hacer, es un trabajo complicado pero hay que hacerlo. Nos falta cultura de la accesibilidad como sí la hay en otros países y tenemos que trabajar en ese sentido. Por eso el Plan no es solo rebajar aceras sino también la difusión y sensibilización. Es difícil establecer un punto de criterio único porque lo que para mi es prioritario para otra persona no lo es”.

-¿A qué se refiere?

“Por ejemplo, tenemos una partida muy pequeña alrededor de los 250.000 euros para accesibilidad y con eso tengo que trabajar estos seis meses. No puedo inventar más porque es lo que tengo. Con el Plan de Accesibilidad tengo que luchar para conseguir el presupuesto año tras año y ponerlo en marcha”.

“Mi meta es que en 2019 optemos a ser ciudad europea accesible”

-¿Ya sabe cuánto va a necesitar?

“Aún no. Simpromi me dará la valoración y una vez que la tenga haré la planificación”.

-¿Qué beneficios tendrá incluir a Santa Cruz en esa red de ciudades accesibles?

“Ahora mismo en España existe una red de ciudades por la accesibilidad, en la que están incluidos más de 60 municipios de toda España, una red que recoge las buenas prácticas que tienen estas localidades. El beneficio principal es que está todo hecho, no vamos a inventar nada, entonces la red hace que nos ahorremos la fase de implementación, error y corrección”.

-Al principio hablaba usted de los retos y el grave problema de accesibilidad, ¿cree qué se ha avanzado algo?

“Decir que no se ha hecho nada en materia de accesibilidad en Santa Cruz no es cierto, sí se ha hecho, poco, pero se ha hecho. Un ejemplo es la oficina municipal de La Granja, que a nivel de accesibilidad es muy buena y no solo arquitectónicamente hablando sino también en el acceso a la información. De hecho estamos iniciando los trámites para solicitar el Aenor de accesibilidad. El objetivo es que todas las oficinas municipales tengan la certificación. De esta forma, no solo ponemos en valor la adecuación de las oficinas municipales sino que también se haga una auditoría anual y si no cumples esos requerimientos, te retiran el certificado”.

-¿En qué se van a gastar esos 250.000 euros?

“Lo primero es la adaptación de algunas instalaciones deportivas, las más concurridas y las que ahora mismo tienen una mayor repercusión como la Acidalio Lorenzo, el pabellón municipal y alguna más. Esto no quiere decir que no vayamos a tocar las demás pero será a partir del año que viene. También vamos a trabajar en las Unidades de Trabajo Social (UTS)”.

-¿Por qué en las UTS y no en otras dependencias municipales?

“El problemas de las UTS es que quienes acuden a ellas son, generalmente, personas sin recursos, y muchas veces con discapacidad, que ni siquiera pueden acceder a la oficina para pedir ayuda. Entonces me parece paradójico que no puedas acceder a un sitio en el que te conceden una ayuda. Intentaremos atender primero a las que tienen mayores carencias y trabajaremos en base a eso. Esto al margen de que puedan surgir problemas graves y no es que surjan de repente sino que la gente tiene un poco más de concienciación”.

“La mesa de accesibilidad tiene que reunirse una vez al mes y no como hasta ahora”

-¿Esa mayor sensibilidad cree que tiene que ve con que el concejal vaya en silla de ruedas?

“La verdad es que sí he notado que hay mas reclamaciones sobre este asunto, no se si tiene que ver con vaya en silla de ruedas y eso da una mayor visibilidad al problema, pero para mi es fantástico porque tenemos que trabajar con la participación ciudadana”.

-En el mandato anterior se puso en marcha la mesa de accesibilidad, ¿qué función va a tener este órgano en estos cuatro años?

“Creo que en estos años no ha tenido el funcionamiento que yo creo debería de tener y que es el de una mesa en la que se compartan los criterios comunes en problemas de accesibilidad. Están representados los diferentes colectivos, técnicos municipales que trabajan en materia de accesibilidad de todas las áreas y creo que será un punto de encuentro de todas las sensibilidades. Mi objetivo es que se reúna mensualmente y no como hasta ahora y en la que sea una mesa de trabajo común en pro de la accesibilidad universal”.

-Esta mesa es la que debe dar salida a la tan ansiada ordenanza de accesibilidad, ¿para cuándo?

“Ya hay un borrador de la ordenanza de accesibilidad y dentro de la mesa se le va a remitir a los diferentes colectivos para que cada uno valore y aporte lo mejor que vea. Queremos una ordenanza consensuada con todos los ámbitos de la discapacidad. Yo puedo tener una visión muy amplia en cuánto que llevo 20 años en silla de ruedas y conocer mucho pero eso no quita que alguien con otro tipo de discapacidad pueda tener un enfoque distinto en la ordenanza”.

-¿Cuándo estará lista entonces?

“Antes de finales de este año tiene que estar aprobada”.