FÚTBOL

España acaricia el billete

España está muy cerca de conseguir el billete para la Eurocopa de 2016, que se celebrará en Francia, tras obtener la victoria en su visita a Skopje (0-1) gracias al solitario tanto de Mata, que marcó al comienzo del choque, por lo que un único punto en los dos encuentros que restan le daría a la Roja su clasificación matemática.

No fue tan brillante como ante Eslovaquia, ni su rival dejó jugar de igual manera, pero España cumplió el trámite y se acercó al objetivo,que parece estar ya en la palma de la mano. Así salió la España de Del Bosque de Macedonia, donde su rival poco dejó jugar desde que el marcador dejase de reflejar el 0-0.

Poco necesitó España para adelantarse en el marcador. Apenas ocho minutos después del comienzo, Mata logró el único tanto del encuentro. El jugador del United recogió el rechace tras una falta y su lanzamiento -algo envenenado- golpeó en el larguero y posteriormente en el rostro del portero macedonio antes de besar la red.

El gol, que recordó al de Jon Andoni Goikoetxea en el Mundial de 1994, permitió a España afrontar el partido con tranquilidad, pero sin el brío que desplegó ante los eslovacos el sábado en Oviedo. No hubo rastro del juego coral que elevó al cielo futbolístico a la Roja, pero Macedonia tuvo buena parte de culpa en este sentido.

Los pupilos de Ljubinko Drulovic defendieron con una línea de seis -impensable en el fútbol moderno- y no dudaron en rascar la tibia de Diego Costa, el más irascible del once nacional. El delantero del Chelsea, otra vez marcado por el desacierto, sigue sin encontrar su fútbol cuando juega con la selección. Mucha voluntad, pero poca efectividad. El de Lagarto ha metido un gol en 9 partidos y fue a Luxemburgo.

Isco, que se hizo con la titularidad, fue de los mejores en una selección que volvió a sustentar sus argumentos en los pies de Silva y de un Mata insaciable, que se desquitó tras su suplencia el pasado sábado en el Tartiere. Cazorla, también en el once, fue quien originó peligro en las inmediaciones de los macedonios, cada vez más cómodos con el paso de los minutos.
Después de pedir un posible penalti sobre Piqué y de que Carvajal estrellase el balón en el larguero en un centro-chut poco antes del descanso, España minimizó sus prestaciones y estuvo un rato jugando con fuego. Hasani, su hombre más puntero, no se quedó de brazos cruzados.

Una falta al borde del área y un balón sin dueño a punto estuvieron de comprometer el triunfo de España. Los de Vicente del Bosque, sin embargo, aguantaron y se dejaron llevar hasta el minuto 90.