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La Frontera da entrada al PSOE en todas las instituciones herreñas

Melissa Armas (AHI-CC) seguirá siendo alcaldesa de La Frontera. | DA
Melissa Armas (AHI-CC) seguirá siendo alcaldesa de La Frontera. | DA

La Frontera se reabre al diálogo tras la retirada de la moción de censura registrada el 8 de septiembre contra Melissa Armas (AHI-CC), que continuará siendo alcaldesa de este municipio herreño de unos 4.000 empadronados. Un correo electrónico -no una carta certificada, que es cómo se notifican las expulsiones en el PSOE- borró de la agenda el Pleno convocado para hoy al objeto de debatir la iniciativa. La disolución del grupo municipal, determinada por la ejecutiva federal, llevó a los tres concejales socialistas a renunciar a la operación y luego hizo lo propio Pedro Luis Casañas, su socio de UF (con tres ediles).

En realidad, solo cabría castigar con la pérdida de la militancia a Zoraida Rodríguez y Gilberto Quintero, porque el candidato a alcalde, Miguel Ángel Acosta, no está afiliado al partido.

“Se ha impuesto la sensatez y el sentido común”, declaró al DIARIO José Alcaraz, responsable de Organización de la regional. Este “gesto de coherencia y madurez política” impulsa, añadió, “un proceso de negociación con Coalición Canaria para la integración del PSOE en las instituciones herreñas”. Esto significa que los socialistas entrarán en los equipos de gobierno de La Frontera y Valverde, donde AHI-CC deberá destituir a los gestores del PP. En el Cabildo se dan un plazo mayor, habida cuenta de las tensas relaciones entre su presidenta, Belén Allende, y quien le movió el sillón en el anterior mandato con la ayuda del PP, Alpidio Armas. El PSOE disfruta de una plácida mayoría absoluta en el pueblo de El Pinar, segregado de La Frontera.

“Es un acuerdo en el que hemos participado activamente desde la ejecutiva regional”, recalcó Alcaraz. La onda expansiva de la bomba que estalló en la isla del meridiano causó daños de consecuencias impredecibles, hasta el extremo de minar la ya de por sí debilitada confianza entre el PSOE y CC por el catálogo de incumplimientos. El temblor de tierras meneó los cimientos del pacto regional y motivó la convocatoria de dos reuniones de la mesa de seguimiento. En la primera de ellas, Julio Cruz lanzó un dardo tranquilizante contra Fernando Clavijo en respuesta a las “agresiones verbales”. Una semana después ya no estaba el secretario de Organización, sino el portavoz parlamentario, Iñaki Lavandera. Previamente, José Miguel Ruano enseñó los dientes pero no mordió. Le llamaron la atención con un toque de la doble vara de medir en las canillas. El PSOE exigió una solución global a un problema generalizado.

Ahora que han cambiado las circunstancias, los socialistas herreños esperan que no hagan caso omiso a sus reivindicaciones. “A ver si esto se reconduce”, clama Acosta.

Alpidio Armas vivió una experiencia traumática hace cuatro años, cuando él y los cinco compañeros en la corporación insular se veían con un pie fuera del PSOE. Sin embargo, el tiempo sentenció a su favor.