José María Casero interviene hoy en el primer Congreso de Recursos Humanos de Canarias, que tiene lugar en el Auditorio Infanta Leonor en Los Cristianos (Arona), con una ponencia sobre la financiación de la Seguridad Social, en la que se propone dar a conocer la situación actual del sistema de protección social en España.
-Resulta ineludible preguntar por la viabilidad de la protección social en España. ¿Hay futuro?
“Por supuesto que hay futuro. El sistema ha pasado antes por situaciones tan complicadas o más que la actual, y siempre ha habido soluciones que han permitido su continuidad. Lo cierto es que es necesaria una voluntad política decidida que permita aportar soluciones para adecuar el sistema a las necesidades futuras, y, además, que la sociedad conozca cuáles son las amenazas, y el porqué se han de tomar determinadas medidas. Congresos como este permiten cumplir con estos objetivos”.
-¿Qué dato es más significativo para sostener el sistema: el crecimiento del empleo o el de las afiliaciones?
“Ambos datos van unidos. Es obvio que sin crecimiento de empleo no hay crecimiento de afiliación; y que el incremento de la afiliación es uno de los pilares básicos para mejorar la financiación del sistema”.
-¿Es razonable el miedo a que la caja no dé para las pensiones?
“Es razonable, porque el miedo es una condición innata al ser humano. Con ello quiero decir que el miedo es bueno en el sentido de que nos va a abocar a tomar decisiones que de otra forma no se tomarían; decisiones que harán más fuerte el sistema y que lo protegerán frente a futuras contingencias. Por ejemplo, el actual Fondo de Reserva surgió en un momento dado por el miedo (real) que existió a la posibilidad de falta de liquidez del sistema”.
-¿Ha aumentado el fraude con la crisis?
“Puede ser, pero lo que sí es cierto es que ha aumentado la lucha contra el fraude, y cada vez somos más beligerantes ante situaciones que buscan esquilmar los Fondos del Sistema, que, no lo olvidemos, son los que nutren mensualmente la nómina de nuestros pensionistas”.
-¿Qué repercusión tiene en la Seguridad Social la emigración de cientos de miles de jóvenes en los últimos años?
“La pérdida de masa laboral activa incide en la perdida de cotizantes actuales y futuros que no nos podemos permitir. Unida a otros factores demográficos, como la baja natalidad, es uno de los principales problemas a los que hay que buscar solución para dotar de fortaleza al sistema”.