A la dotación del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) en Santa Cruz de Tenerife le falta un centenar de policías nacionales para estar a la altura de la media existente en Canarias. Así lo denunció ayer el responsable de la Confederación Española de Policía (CEP), José Luis Gallardo, en una nota de prensa que posteriormente amplió en conversación con este periódico.
Gallardo insiste en vincular directamente esta carencia de medios humanos y materiales con la oleada de criminalidad que sufre la capital tinerfeña, donde los robos con violencia han aumentado más del 28% en lo que va de año y los hurtos más del 23%, en datos facilitados por el propio Ministerio del Interior. Santa Cruz de Tenerife es una de las ciudades peor paradas de toda España en este balance, al punto que el aumento global de la criminalidad (delitos y faltas) es superior al 15%.
La CEP detalla la descompensación de recursos humanos del CNP en esta ciudad en “más de 5,3 puntos por debajo de la media que registra el conjunto de la Jefatura Superior de Canarias e incluso 1,71 puntos menos que la del total de la provincia de Tenerife. De esta forma (continúa la nota) y sin que sean asignados a esta isla policías recién jurados desde 2010, impidiendo así el necesario refuerzo y recambio generacional, el despliegue de la Brigada de Seguridad Ciudadana en las calles de la capital se ha visto comprometido de forma intensa, afectando a la seguridad de los policías”.
Cabe recordar que la ley orgánica 2/86 responsabiliza al CNP de la seguridad ciudadana en esta capital, a pesar de lo cual hace ya muchos años en que solo la aportación de la Policía Local santacrucera garantiza plenamente la misma.
Pero el portavoz del CEP no se limita a criticar y ofrece soluciones que son perentorias, habida cuenta de que el Gobierno actual constriñó las promociones de años anteriores a un número insuficiente (unos 200 por año) y en cuanto a la última, de 1.300 efectivos, no enviará policías nacionales a Canarias hasta 2018. La solución de Gallardo es clara: “Hay más de 100 policías tinerfeños que quieren volver a su Isla y no pueden: bastaría un concurso extraordinario para acabar con esta situación. Y se justifica, precisamente, en esas estadísticas terribles”.