la claqueta

Un escándalo de noche

Quién no ha pensado alguna vez qué se cuece entre bambalinas de esos especiales enlatados de fin de año que las cadenas privadas generalistas nos ofrecen cada Nochevieja: actuaciones en playback con los artistas del momento luciendo palmito, sonrisas profident de los presentadores, público vestido de gala lleno hasta las trancas de confetis y serpentinas y dándole al matasuegras… Álex de la Iglesia se ha sumergido, de la mano de su casi inseparable guionista, Jorge Guerricaechevarría, en este peculiar pandemonio con una delirante y estrambótica comedia coral en la que participan abundantes caras conocidas del cine español, muchas de ellas habituales en los filmes del director vasco. Mi gran noche va de menos a más y se sujeta en la habilidad de Álex de la Iglesia de domeñar el ingente caos que se genera en sus cintas, combinando en esta ocasión gags del todo previsibles con otros más divertidos (los menos, dicho sea de paso) que se reparten por las varias subtramas que pululan en la eterna grabación del programa. Un universo en el que se intenta caricaturizar el show business de determinadas cadenas televisivas (aquí la referencia es clarísima), la lucha de egos, los arribistas, la corrupción, el amiguismo, las zancadillas laborales, los despidos… Vamos, una especie de caleidoscopio de la España actual que, sin embargo, no pretende ejercitar siquiera una crítica ácida, sino simplemente retratar bajo el paraguas de la parodia lo que por desgracia tenemos y padecemos. Comedia grupal al más puro estilo patrio -que gente como Luis García Berlanga sublimó-, donde destaca del amplio y convincente elenco el gran Raphael (ya presente virtualmente en la filmografía de Álex de la Iglesia con Balada triste de trompeta), interpretando una suerte de reverso maligno de él mismo, en el que, por cierto, se desenvuelve a las mil maravillas. Mi gran noche, que tiene una notable puesta en escena y un ritmo frenético, no llega a parir momentos hilarantes y su tono humorístico se debe más a su experimentado y acertado reparto (geniales como siempre Terele Pávez y Carmen Machi, además de los sufridos Carlos Areces y Pepón Nieto) que a otra cosa, y por ahí cojea.